Un
nuevo año, un nuevo día del amor. Cuántos: “Te veo en la terraza”,
“me gustas”, “te quiero”. El aroma del chocolate impregna el ambiente,
es casi empalagoso. Pasteles y dulces gigantescos, cartas perfumadas y rostros
angustiados. ¿Quién cumplirá su sueño, quién saldrá victorioso en este
decepcionante juego de horror? Amor vacío bañado en chocolate, cortado en
forma de corazón...
-¿Zo...zorro?-Pregunta
un conocido pelirrojo, casi con miedo.
-Hmmm...-Murmura
el otro chico.
Ambos
están en la terraza de la preparatoria, ha pasado un año desde que
comenzaron a estar juntos, por lo tanto es su aniversario. Rukawa esconde un
pequeño chocolate en el puño, en cambio, Hanamichi sostiene un enorme
paquete entre sus manos, es un pastel; pero desde que llegó, el chico de
cabello rojo no hace más que balbucear incoherencias:
-Ehhh...este...hmmm...zorro...yo...
Rukawa
lo mira, con sus bellos ojos azules, no tiene idea de lo que está pasando, y
pregunta:
-¿Qué
te pasa, torpe?
Hanamichi
baja la mirada, y observa el pastel, fijamente, mientras dice:
-Ehmm...Hace
un año...Pasó algo parecido...¿Te acuerdas? Tú estabas en el mismo
lugar...Y me hiciste la misma pregunta...Fue un gran día...
Rukawa
se sonroja un poco, pero no dice nada. El pelirrojo continúa, después de una
breve pausa:
-Sin
embargo...Eso ha...quedado atrás...es un nuevo día y yo sólo quería darte
las gracias por todo...
El
rostro del zorro se vuelve aún más pálido, no puede creer lo que está
escuchando. Un dolor desconocido comienza a brotarle del pecho.
-¿Quién
es?-Pregunta Rukawa con voz vacía-¿Por quién me cambiaste?
Pero
Sakuragi no responde, y le ofrece el pastel:
-Toma.
Rukawa
lo mira, pero no lo acepta:
-No
lo quiero.
-Está
bien-dice el pelirrojo-Se lo daré a Yohei y a los demás...
-Dime
quién es-Insiste Rukawa, casi con rabia.
Los
ojos de Hanamichi brillan, al tiempo que se ruboriza y dice:
-Haruko...
El
zorro puede sentir cómo su estómago se revuelve.
-Creí
que esa niña no te hacía caso-Murmura Rukawa, fríamente.
-Eso
era al principio...Esta mañana me declaró su amor...-Murmura el pelirrojo,
con emoción-Y yo también...
Rukawa
aprieta los puños y destroza el chocolate. Después dice:
-Has
lo que quieras, torpe.
-No
te enojes...-Murmura Sakuragi.
-Cállate.
El
zorro se da la vuelta, sus ojos están un poco húmedos, quiere decir algo,
pero hay una persona frente a él, que se lo impide. Es Haruko. Tan bella, tan
frágil, tan inocente, tan pura...pero a la vez tan peligrosa. La mirada de
Rukawa se torna fría, impenetrable, no parece triste.
-¡Haruko!-Exclama
el pelirrojo, mientras corre junto a ella y la abraza.
La
frágil chica no se resiste, pero mira a Rukawa por un momento, y se siente
algo turbada. Él lo nota, y se siente aún más molesto:
-Ella
no lo quiere-Piensa-Ese torpe no me quiere...y yo lo quiero...¡Es absurdo!
Trágate
esa, muñequito de porcelana, hombre deseado, hombre perfecto, pestañas de niña,
facciones finas y suaves...Que tengas un feliz día del amor...Y recuerda que
nadie te ama.
Rukawa
suspira y camina junto a la recién formada pareja, sin mirar a ninguno de los
dos, y desaparece, escaleras abajo. El chocolate que había comprado para
Hanamichi se derrite en la terraza, junto al pelirrojo, su chica y su amor vacío.
ˆ_ˆFinˆ_ˆ
Hanamichi
x Rukawa