Han
pasado dos días desde que los extraños entraron en la vida de nuestros
personajes y desde ese incidente no se han vuelto a ver, Ranma y Akane están
en la escuela, ya todo parecía tranquilo hasta que...
-¡Buenos
días!-Saludó el profesor y mirando hacia la puerta exclamó-Por favor,
pasa-en unos instantes el joven de los ojos azules entró a la sala.
-*No
puede ser*-pensó Ranma.
-Este
es su nuevo compañero viene de China y su nombre es Blue Sakamisha, espero
que todos le den una cálida bienvenida.
-Qué
guapo está.
-Mira
esos hermosos ojos azules.
-Ojalá
no tenga novia.
El
murmullo fue general, todos comentaban, el profesor tosió para acallar los
rumores y luego mirando el salón dijo:
-Siéntate
detrás de Ranma.
Blue
avanzó lentamente hasta su asiento, al pasar junto a Ranma le dedicó una
sonrisa, un tenue color rojo subió a sus mejillas, Ranma trató de ocultarlo
tapándose con un libro, pero lo único que consiguió fue botar sus cosas
causando un gran alboroto, el profesor alzó la vista.
-Hagan
como el señor Saotome, evitando el ruido, claro, y saquen sus libros de matemáticas.
Ranma
recogió sus cosas en silencio, pero no pudo poner atención pues en su mente
una pregunta vagaba incesantemente, ¿por qué? Y sabía que si no hacía algo
quizás nunca hallase la respuesta...
-Ranma,
Ranma, ¡RANMA!-gritó Akane al oído de Ranma.
-¿Qué
diablos té pasa?
-Las
clases terminaron hace veinte minutos y tú todavía estas sentado, casi todos
se han ido ya.
Ranma
al oír esto se volteó, Blue no estaba por ningún lado.
-¿Buscas
a alguien?-Una voz desconocida le habló, Ranma volteó y vio a Blue apoyado
en la puerta.
-Pensé
que te habías ido ya-dijo Akane un tanto molesta-Tú y tu padre tienen mucho
que explicar.
-¡Lo
sé, es por eso que volví!-y mirando a Ranma le dijo-Necesito conversar
contigo, quizás encuentres respuestas a algunas de tus preguntas.
Ranma
miró a Akane, ella movió la cabeza afirmativamente y le dijo:
-Está
bien-y luego salió de la sala.
-¡Vamos!-Ranma
se paró lentamente y tomando sus cosas siguió a Blue.
-Y
es por eso que han llegado los Sakamisha-Terminó diciendo Genma, mientras por
sus mejillas corrían unos ríos de lagrimas, Soun a su lado no sabía que
decir, de verdad nunca se hubiera imaginado algo así, y la confidencia de
Genma lo había pillado de sorpresa, después de un rato exclamó:
-No
hay nada que hacer, ahora el único que puede hacer algo es Ranma y quiéralo
o no, la decisión es sólo de él, esperemos que pueda pasar esta prueba,
como lo hizo usted-tras decir esto Soun se paró y caminó hacia la puerta que
daba al jardín, Genma siguió sentado, cuando de repente entró Akane con la
alegría de siempre.
-Buenos
días papá, tío Genma.
Genma
la miro, Ranma no venía con ella, lo cual le dio una mala corazonada y
corriendo donde ella le gritó:
-¿Y
Ranma, dónde está?
-Se
fue con Blue.
-¿BLUE?
-Sí,
el chico extraño de ojos azules-y en tono irónico replicó-Tú debes
conocerlo tío, después de todo conoces al padre, ¿no?
Genma,
al oír esto, se fue a un rincón y comenzó a llorar.
-¿Qué
le pasa al tío Genma?
-Nada
hija, son viejas historias-y mirando a Genma le dijo muy enojado-Genma levántate,
y sécate la cara, ya no puedes hacer nada, deja que el buen juicio de Ranma
lo ayude a pasar esta dura prueba.
Akane,
al oír esto, se llenó de dudas y mientras salía del dojo no podía dejar de
pensar, el tío Genma y los Sakamisha, ¿cual era la prueba que Ranma debía
enfrentar? ¿Que sucedería si no la pasaba? Su corazón se aceleró, Ranma
estaba en peligro y ella debía hacer algo, así una pequeña idea comenzó a
formarse en su cabeza...