9 de Septiembre, 23:30 PM. Mansion Kido.
Seiya: ¡Vamos Shun, apaga las velas y pide
un deseo, así comeremos pastel!
Ikki: ¡Seiya! ¿Podrías dejar de ser tan
tú y tratar de ser más otro?
Shun: O'niichan, no te molestes tanto con
Sei-chan, todos queremos pastel, así que-apaga las
velas-comamos pastel.
Se: ¡ViVa! ¡PaStEl!
Saori: Pero antes tenemos que darle nuestros
regalos a Shun.
Se: Oohhhhh....-profundamente desesperado.
Sh: Pero puedes comer pastel mientras abro
los regalos, ¿ok?
Se: ¡Gracias Shun, eres lo máximo!-dijo
abalanzándose sobre el pastel (que por suerte era lo
bastante grande).
Shiryu: Es bueno saber que alguien disfruta
de los cumpleaños.
Sh: Bueno, veamos este-dice agarrando un
paquete de color verde con listones azules muy elegante y
bien armado-debe ser de Shiryu. Sy: No sé como
adivinaste, pero espero que te guste.
Sh: Es por los colores y la forma en que esta
envuelto, te delatan-lo abre y ve que es un libro-"El
Alquimista" (1), arigatou Shiryu. Había querido leerlo
hace tiempo.
Sa: Muy bien ahora el mío, espero que te
guste-dijo dándole una elegante bolsa de la cual sacó una
caja grande negra con un moño blanco, cuando la abrió se
encontró con un bellísimo conjunto en negro con una camisa
blanca que le dejó sin habla.
Sa: -Sonriendo- ¡Sugoi! Sabía que te
gustaría, sólo espero haber acertado la talla.
Sh: ¿Pero cómo supiste que lo quería?
Sa: Sheena te vio mirándolo en el centro
comercial y me contó, así es de las dos. Anda a
probártelo.
Sh: Sí, enseguida vuelvo **Como 20
minutos después** ¿Y bien, cómo me veo?-preguntó
haciendo a todos girarse. El sonido de mandíbulas golpeando
el suelo fue más que elocuente. El joven santo lucía como
un sueño, el traje no sólo era de la talla sino que
parecía como si hubiera sido hecho específicamente para
él. La chaqueta ayuda a marcar su figura, que con sus 24
años era bastante varonil, con sus espaldas anchas, cintura
estrecha. No había forma de describirlo. Sh: ¿Me queda
bien?-volvió a preguntar un poco temeroso.
Se: ¿Bien? Hombre, si tus admiradoras del
torneo galáctico te vieran ahora te violarían en el mejor
de los casos.
Ik: Seiya, deja de decir estupideces-mira a
Shun-Ototo-ese traje te queda increíblemente.
Sh: ¿De veras? Gracias. No estaba muy seguro
de haber escogido bien, ¿dónde está Sheena? Quiero darle
las gracias.
Sa: Tuvo que salir por un encargo que le
hice, así que volverá algo tarde hoy.
Se: ¡Es hora de que veas el mío! ¡El mío!
¡El mío!-empezó a brincar Seiya sobre el sofá como un
niño, así que Shun tomó el intento de paquete envuelto
(era obvio que el papel de envolver y el lazo habían ganado
la batalla) y lo abrió, encontrando una especie de álbum de
fotos. Cuando lo abrió vio fotos de todos ellos cuando eran
niños en el orfanato, fotos y recortes de diarios y revistas
del torneo galáctico, fotos más recientes como el
cumpleaños de Ikki-san...Todo esto hizo que Shun casi
llorara.
Se: -Bastante serio-todas las familias tienen
un álbum de fotos o algo así, por eso pensé en fabricarnos
uno, pero fue algo difícil así que de momento las que logre
juntar son para nuestro rayito de sol, ¡Feliz Cumpleaños
Shun!-dice pasando sus brazos por los hombros de Shun con
lagrimas en los ojos.
Sh: ¡Seiya! Muchas gracias, lo conservaré
siempre...
Hy: Muy bien ahora es el turno de...de
nuestro regalo.
Sh: ¿Nuestro?
Ik: De Hyoga y mío.
Sa-Sy-Sh-Se: ¡¿Qué cosa?! ¡¿Un regalo de
los dos?!
Ik: ¡Oh! No es para tanto, todo fue una
coincidencia.
Sh: ¿En serio? ¿Cómo paso?
Hy: Para eso es mejor que veas primero tú
regalo-entonces Ikki le acerca la caja de la cual un hermoso
cachorro de perro siberiano gris con blanco, ojos celestes,
con un moño rojo en el cuello salto a sus brazos,
lamiéndole la mejilla izquierda.
Sh: ¡Oh Dioses! ¡¡ES BELLÍSIMO!!
¡Gracias muchachos! Siempre quise tener un cachorrito como
mascota, ¿pero cómo pasó todo esto? Hy: Estuve días
tratando de ver qué regalarte, cuando pasé por la tienda y
vi este hermoso cachorro. Así que no lo pensé dos veces y
entré. Cuando voy a tomar al perro por el collar otra mano
también lo hace y cuando miro hacia arriba, ¿con quién me
encuentro?-dice apuntando a Ikki.
Ik: ¡¡PERO YO LO HABÍA VISTO PRIMERO!!
¡¡PAJARRACO ESTUPIDO!!
Hy: NO COMIENCES PORQUE EN ESE CASO TÚ
TAMBIEN SERÍAS UN PAJARRACO ESTUPIDO!!!
Ik: NO TE ATREVAS A HABLARME EN ESE TONO RUSO
ESTUPIDO!!! A MENOS QUE QUIERAS TERMINAR ASADO!!
Hy: A NO SER QUE YO TE CONGELE A TI PRIMERO
LAS ALAS Y LAS CUELGE DE ADORNO EN LA CHIMENEA-en ese
instante ambos toman posiciones para lanzar sus ataques
cuando escuchan. Sh: Eres muy lindo Cerberos.
Ik: ¡¿Cerberos?!
Hy: Pero no es...
Sy: El perro...
Sa: ¿De los infiernos?
Se: ¡Oh diablos que sí lo es! (2) ¿Porque
a un perro tan lindo le pones ese nombre?
Sh: Oh Sei-chan, lo que pasa es que tú lo
conociste cuando andaba de mal humor, pero en realidad
Cerberos es un magnífico perro y mascota.
Se: Si vives en el infierno, claro que
sí-todos lo miran feo-Lo siento. Sh: No importa Seiya, ya lo
tengo asumido-sonriendo-gracias por los regalos me gustaron
mucho-al perro-ven Cerberos, vamos a buscarte un lugar donde
dormir.
Ik: Creía que dentro de la caja había una
canastilla para el perro.
Hy: Yo también, si ese idiota no la hecho
voy a golpearlo!!!
Sh: Vamos no es para tanto.
Ik: Por lo que nos cobró, sí lo es, podría
haberme comprado una cama con ese dinero.
Sy: ¡Aquí está! Es bastante linda.
Se: Lo malo es que en un par de semanas más
no le servirá.
Sa: ¿De qué hablas?
Se: Esos son perros grandes, en un par de
semanas será del doble de tamaño.
Hy: ¡Demonios!-en ese instante Tatsumi entra
y le comunica a Saori ciertas noticias preocupantes sobre una
de las sucursales de la compañía en Nueva York, así que se
va con Tatsumi y los chicos se quedan solos.
Se: ¡¡¡ES HORA DE SACAR EL LICOR!!!
Ik: ¡¡¡ASÍ SE HABLA!!!-no es necesario
decir qué fue lo que pasó con esos 5 chicos y la extensa
barra de licores de la mansión, ¿cierto? Baste decir que a
excepción de Ikki, todos estaban MUY ALCOHOLIZADOS. Por lo
que se tuvieron que ayudar entre ellos (Seiya-Shiryu;
Shun-Hyoga) para poder logra llegar a sus habitaciones,
excepto Ikki que se quedó al lado de la chimenea (era una
noche muy helada según él).
~ ~ ~En Un Pasillo~ ~ ~
Sh: Oye Hyoga, quiero pedirte algo-dice
tambaleándose mientras es ayudado por Hyoga.
Hy: ¿Qué cosa Shun?
Sh: Quiero hablar contigo un momento.
Hy: Pero Shun, no estás en condiciones.
Sh: Estoy perfectamente.
Hy: Por qué no esperas hasta mañana,
cuando....
Sh: -Colocándolo bruscamente contra una
pared-Quiero que me escuches. Es muy importante, por favor.
Hy: Shun me asustas-dice viéndolo a los
ojos.
Sh: No tienes porque-dijo presionando su
cuerpo contra el de él y contra la pared-yo nunca te
lastimaría-dijo tomándolo de las muñecas, mi precioso
ricitos de oro-susurró sobre sus labios suaves y delgados.
Hy: ¡Estás ebrio, quítate!-dijo corriendo su rostro.
Sh: ¿Sabes que te ves muy sexy hoy?-susurró
en su oído, para luego mordisquearle el lóbulo de éste-me
provocan ganas de devorarte a besos-dice besándole el cuello
mientras que su lengua también le recorría su piel blanca
tan suave y en cierta forma dulce. El chico rubio, del cual
todos se burlaron siempre por ser extranjero había
desarrollado un cuerpo en extremo varonil, con espalda ancha,
cintura estrecha, musculoso, pero no en exceso, de piernas
firmes, brazos musculosos. Su cabello ahora era más corto,
pero seguía siendo tan hermoso como siempre, suave y
brillante. Y sus ojos. ¡Dios! Esos ojos capaces de
hipnotizar a cualquiera cosa o a cualquiera. Había soñado
mucho con ese cuerpo entre sus brazos y no lo iba a dejar ir.
Apretó más su cadera contra la de él mientras que con una
rodilla le separaba las piernas para colocarse entre ellas
sin dejar de besarle un sólo momento ni la boca, ni el
cuello.
Hy: Sh..Shun...-suspirando y
gimiendo-¡E...eso, ahhh!
Sh: -Mirandolo-¿Te gusta, ricitos? ¿Te
gusta, cierto?
Hy: -Asintiendo entrecortadamente-Sí,
m..me...me gusta, mu..mucho... Sh: ¿Quieres más,
ricitos? Quieres más, ¿cierto? Muy bien, voy a soltarte, no
intentes nada, ¿de acuerdo?-Hyoga asiente-Muy bien-entonces
cuando lo suelta, Hyoga coloca una de sus manos en su nuca y
la otra en su espalda donde empezó a jugar con sus rizos y a
sacarle la camisa mientras lo besaba furiosamente.
Sh: ¿Hyoga? ¡Oh Dios! Eso fue...-decía
mientras Shun metía sus manos y jugaba con ellas debajo de
la camisa de Hyoga pasándolas por su blanca piel, haciendo
que jugaran con sus tetillas las cuales reaccionaron
colocándose duras y erectas. Entonces Shun empezó a
desabotonarla, mientras Hyoga hacía lo mismo con la de Shun.
Cuando llegó como a la mitad introdujo sus manos y empezó a
acariciarlo. Entonces Hyoga susurró en su oído:
Hy: ¿Shun-chan, por qué?
Sh: Porque...quiero mí regalo de
cumpleaños...y ese eres tú.
Hy: Ven por él entonces-dijo mordisqueando
su oreja y llevándolo a su habitación (de Shun).
~0~0~0~0~0~
Dentro de la habitación Shun cerró la
puerta con seguro mientras seguía besando a su ricitos
mientras éste a la vez le sacaba la chaqueta y la camisa.
Luego de eso Shun lo tiró sobre la cama y luego se colocó
encima donde comenzó a acariciar su pecho desnudo, a besarlo
de arriba a abajo, mordisquear y lamer sus pezones mientras
que Hyoga jugaba con sus alborotados mechones de cabello, lo
besaba y de a poco empezó a desabrocharle los pantalones
para luego quitárselos definitivamente, mientras que Shun
hacía lo mismo con Hyoga. Entonces ambos comenzaron a
acariciarse mutuamente durante unos momentos, mientras caían
besos calientes sobre la piel, pecho, brazos, cuellos, bocas.
En un gemido Shun introdujo su lengua en la boca de Hyoga
para que jugaran calientes en las húmedas cuevas,
trabándose en un arduo combate ,luchando incansables por un
largo rato, mientras las manos curiosas exploraban los
cuerpos calientes y sudorosos despojándolos de la última
barrera de ropa, dejando a los cuerpos totalmente libres para
poder fusionarse y volverse uno mientras el contacto de sus
pieles se hacía más y más profundo y largo. Entonces Hyoga
rodeó con sus piernas la cintura de Shun y lo atrajo más
hacia él. Con esto Shun, comenzó a frotar sus entrepiernas,
al comienzo lentamente y luego más rápido mientras
introducía 1 ó 2 dedos para dilatarlo, ante lo que Hyoga
comenzó a gemir, haciendo que Shun se excitara más y
moviera sus dedos más adentro y más rápido.
Sh: ¿Te gusta, ricitos?-Hyoga
asiente-Entonces esto te va a fascinar.
Con esto Shun se inclinó sobre la cintura de
Hyoga y comenzó a recorrer con su lengua lentamente hacia
abajo, luego se desvió hacia la entrepierna donde comenzó a
mordisquear la blanca piel mientras sus dedos jugaban con los
testículos desviándose a propósito del sitio entre las
piernas que demandaba su atención.
Hy: Déjate de tonterias- Shun sonrió
divertido ante el tono de voz de su 'inocente ricitos de oro'
que fue muy imponente.
Sh: Si así lo quieres mi lord-dijo
sarcástico mientras se agachaba otra vez para introducirlo
en su boca, primero la punta y luego de a poco el resto
mientras lo recorría con su lengua. Entonces Hyoga colocó
sus manos sobre la cabeza de Shun para obligarlo a continuar
mientras sus dedos se enredaban en los alborotados mechones
de pelo de Shun.
Hy: ¡Oh Shun! Eso es...-gemía mientras
movía las caderas siguiendo el movimiento dictado por lo que
hacía el joven santo con su miembro- ¡Oh Dios! Qué bien se
siente...hazlo...más fuerte.
Sh: *Te tengo*-pensó mientras veía cómo
Hyoga se retorcía sobre las sabanas, del puro placer que
sentía- *eres mío ricitos, sólo mío*
Hy: *¿Será...sólo por el alcohol? Shun si
tú...tan sólo...* -pensaba mientras veía la cabeza de Shun
entre sus piernas. Poco después, cuando el miembro de Hyoga
estuvo duro, Shun se detuvo.
Hy: Aún no...por favor...
Sh: Ahora viene la mejor parte, ricitos.
Hy: Shun, tú...
Sh: Creo que ya estás listo para darme mí
regalo, ¿qué dices?-dijo para luego plantarle un profundo
beso.
Hy: Que lo puedes tomar ahora.
Sh: Como digas-entonces Shun se colocó en
posición sobre la cama, arrodillándose, abriendo las
piernas de Hyoga y colocándolas alrededor de sus caderas, en
ese momento comenzó a adentrarse suavemente, pero con
firmeza en su pequeño ricitos, el cual se retorcía de dolor
y placer sobre las sábanas blancas de la cama ante las
embestidas de Shun.
Sh: ¿Lo sientes? Sientes lo estrecho que
eres, ¿ricitos?
Hy: Shun...más fuerte...por favor....-con
esto Shun continuó sus ataques más rápido y más fuerte
haciéndolo gemir y gritar aún más fuerte a Hyoga.
Sh: ¿Sientes cómo estoy dentro de ti,
ricitos?
Hy: Sí....Oh Shun, me encajas tan bien...
Entonces Shun usó una de sus manos y
comenzó a trabajar sobre el miembro erecto de Hyoga
masajeándolo firmemente, lo que llevó a Hyoga hasta el
borde, viniéndose en la mano de su amante. Poco después
Shun derramó su líquido caliente dentro de él, llenándolo
por completo. Luego de salirse, se recostó sobre él,
besándolo y acariciándolo mientras él le correspondía
cada beso y caricia con otro más apasionado que el anterior.
Hy: Eso...fue...increíble.
Sh: Lo sé, ricitos, lo sé.
Hy: -Algo nervioso- Shun tú...esto...es por
el....
Sh: ¿Alcohol? No estoy tan ebrio-en su
oído-Además todo ese ejercicio lo saco por completo de
mí...Hace mucho tiempo, casi al comienzo.
Hy: Supongo que eso es algo bueno-entonces lo
da vuelta colocándose a su espalda-Para mí, claro
está-dijo añadiendo una sonrisa depredadora, pero que
lucía muy bien en su cara 'inocente'. Sh: -Fingiendo
que está asustado- Hyoga, ¿qué haces?
Hy: Ya vi lo que tú puedes hacer con tu
regalo, ahora voy haber qué puedo hacer yo con él.
Sh: Suena bien -lo mira- averigüémoslo
-dice agarrándolo por la nuca, atrayéndolo hacia él y
dándole un fuerte beso-sé que será muy interesante.
Hy: Puedes apostarlo.
* * *~OWARI~
(~FIN~)* * *
Observaciones: (1)"El
Alquimista" es de Paul Coelho y todos los derechos le
corresponden a él, y no se pretendió hacer nada malo al
ponerlo en este fic (ni tampoco dinero). (2) En el manga de
Hades Shun y Seiya se encuentran con Cerberos, que es el
perro de tres cabezas que cuida la entrada al infierno, y
éste casi se come a Seiya (lo tenía en su mandíbula, pero
no se lo alcanzó a tragar) por eso esa reacción de Seiya.
Shun X Hyoga