Capítulo 11: Dolor amoroso
En el gimnasio de Ryonan.
"Pareces feliz, Sendoh".
Koshino miró a Sendoh, quien estaba parado en la cancha, con una sonrisa de felicidad en los labios.
"Pareces algo sospechoso, Koshino".
"¿Si?...¿Qué está sucediendo?"
"Pues, nada en especial".
Sendoh sonrió. Después recogió el balón y comenzó a caminar en la cancha.
"¡Oye!...Compórtate, Sendoh".
Al mirar su espalda, Koshino pudo sentir como si Sendoh estuviera atrapado en un agujero sin fin, del cual sería difícil salir.
Sendoh lo miró, con su usual sonrisa.
"¿Qué sucede? Mi hermoso Koshino".
"Sólo espero que pienses nuevamente sobre esa relación tuya".
"Sé lo que estoy haciendo. No te preocupes, amor".
"¡¡No me digas, AMOR!!"
Gritó Koshino completamente sonrojado.
Mientras Sendoh seguía sonriendo, descubrió una sonrisa especial en su rostro.
"Yo sé que es un placer peligroso, pero eso no significa que sea para siempre. No estoy jugando con ello, pero he puesto todo mi corazón en él".
Sendoh desvió la mirada hacia el claro cielo azul, mientras pensaba.
Koshino pudo sentir la seriedad de Sendoh como una relación anormal con Rukawa. No sabía por qué, pero de pronto sintió un ligero dolor en lo más profundo de su cuerpo. Un penoso dolor amoroso que lo hizo sofocar. ¿Un dolor amoroso de qué? ¿Por qué lo había sentido tan de pronto? Koshino no pudo explicarse la razón, no quería conocer la razón.
**** *0* ****
Noche.
Koshino caminaba hacia su casa con Fukuda.
Fukuda miró a Koshino.
"¿Qué pasa?"
"...Nada".
Koshino miró el cielo oscuro.No sabía. Realmene no lo sabía. Estaba de mal humor desde la práctica. Ese ligero dolor amoroso lo había deprimido demasiado. De pronto alguien lo abrazó ligeramente desde atrás.
"No jueges, Sendoh".
Koshino no quiso mirarlo.
"¿De vuelta a casa?"
Koshino volteó hacia él.
"Sí..."
Koshino dejó de hablar, porque vio a Rukawa caminando junto a Sendoh.
El penoso dolor amoroso brotó otra vez. Sintió dolor dentro de su corazón.
Miró hacia otro lado. Odiaba ese sentimiento de dolor. No podía sentir esa clase de dolor amoroso. Sendoh y Rukawa no eran de su incumbencia.
"...¿Qué sucede? ¿Koshino?"
La voz de Sendoh lo hizo volver a la realidad.
"¡Nada!...Yo voy primero".
Koshino corrió lejos, sin mirar atrás. Quería olvidarse de su dolor.
"¡¿Qué pasa!? ¡¿Fukuda!?"
Sendoh estaba confundido.
Pero Fukuda no respondió, miró a Sendoh y después continuó caminando, pensativo.