Touya x Yukito

Touya no shinjitsu no kimochi
(Los verdaderos sentimientos de Touya)

Por: Andrea Doolan

Traducido por: Sailor Rukawa


Era un hermoso día de primavera en la preparatoria Seijou. Los cerezos estaban en flor, y había una frescura en el aire que delataba un invierno no muy lejano. El brillante sol, al menos, prometía que el verano pronto haría su aparición.

Era el primer día de clases de un nuevo año escolar. Chicas sonrientes podían verse por doquier. Algunas estaban entrando en la secundaria. Otras discutían sobre en qué grupos les gustaría estar. Otras se lamentaban por estar en tercer año de secundaria o preparatoria, y pensaban en todo el trabajo que les esperaba por pasar sus deseados exámenes.

También había muchos chicos. Varios estaban bromeando con sus viejos amigos y hablaban sobre los equipos donde pensaban entrar. Otros estaban intensamente concentrados en los estudios y leían un libro mientras caminaban hacia la escuela.

Un chico en particular, que vestía un saco azul claro, camisa blanca, corbata negra y pantalones negros; estaba montando en su bicicleta por un solitario camino. Muchos cerezos estaban junto al camino, creando una mezcla de luz y sombra sobre el piso. El chico estaba murmurando algo para sí mismo y parecía algo indiferente. Se detuvo junto a cierta esquina. La misma junto a la que se detenía cada mañana desde que había comenzado la preparatoria.

"Yuki," dijo el chico de cabello negro.

"Hola, To-ya," dijo el chico de cabello grisáceo, que esperaba en la esquina. Era unos 20 cm más bajo que el muchacho de la bicicleta.

Yukito subió a su propia bicicleta y comenzó a pedalear junto a Touya.

"Y bien, ¿cómo se siente iniciar el tercer año?" preguntó Yukito.

"No lo sé," respondió su amigo. "Es molesto ser uno de los más grandes de la preparatoria. Y las clases serán mas estrictas."

"No olvides los exámenes de admisión para los que tendremos que estudiar"

"Sí." dijo Touya.

"Me pregunto si estaremos en la misma clase el próximo año."

"No lo sé..."

Entonces ambos vieron su escuela emergiendo en la distancia. Se turnaron para pasar por la entrada y después estacionaron sus bicicletas. Fueron saludados por muchas personas sonrientes e por comenzar el nuevo ciclo escolar. Ambos amigos se reunieron con los otros estudiantes y entraron al edificio, preguntándose en qué grupo les habría tocado.

~*~*~*~*~

Cuando sonó la campana, señalando la hora del almuerzo, Touya se dirigió al salón 3-C. Desgraciadamente, él estaba en la clase 3-D, lo cual significaba que no podía pasar todo el día con su amigo. Este pensamiento lo hizo entristecer un poco.

"Oye, Yuki. ¿Estás listo para el almuerzo?"

Era toda la iniciativa que Yukito necesitaba para terminar su trabajo, tomó su generoso almuerzo y se reunió con Touya para comerlo afuera, sobre el pasto. Aparentemente, la idea era popular. Pues, prácticamente, cada estudiante de Seijou estaba comiendo en el mismo lugar.

"Sakura comienza el quinto grado hoy, ¿cierto?" preguntó Yukito, entre mordidas de arroz.

"Sí, no puedo creer que haya crecido tanto. Estará en la secundaria antes de que me de cuenta, y ya no seré capaz de protegerla como ahora."

"To-ya, proteges demasiado a Sakura," dijo Yukito, sonriendo.

"Supongo. Pero necesita a alguien que la cuide".

"Contigo haciéndolo, estoy seguro de que se convertirá en una maravillosa mujer."

Touya se sonrojó un poco. "Gracias."

Después la conversación se centró en asuntos relacionados con la escuela y los exámenes de admisión.

~*~*~*~*~

Esa noche, después de su práctica de fútbol, Touya pedaleó hasta su casa bajo el atardecer.

"Ya regresé."

"¡Bienvenido!" Gritó su padre desde la cocina.

Touya subió las escaleras para dejar su mochila en su habitación. Escuchó varios ruidos viniendo de la habitación de Sakura, así que tocó la puerta para ver lo que estaba sucediendo. Pudo escuchar varios quejidos llenos de pánico y después silencio.

"¡Entra!"

"¿Qué es ese ruido?"

Sakura rió nerviosamente mientras mantenía una mano sobre su almohada. "Nada...Digo, era la televisión..."

Touya entró.  "¿Cómo estuvo tu primer día de clases?"

De pronto los ojos de Sakura se volvieron muy brillantes. "¡Ah! ¡Fue muy emocionante! ¡Tomoyo está en mi clase!  ¡También Li! Nuestra nueva profesora parece agradable. Espero que no nos haga trabajar mucho...¡Ah! ¡¿Adivina qué!? Estamos prendiendo nuevas cosas en el equipo de porristas. Debo practicar bastante antes de la próxima reunión. No puedo esperar a que sea mañana. ¡Se siente tan bien iniciar un nuevo año!"

Touya tenía una expresión confundida en el rostro. "Si tú lo dices...Es bueno saber que lo estás disfrutando tanto."

"¿Y tú, hermano? ¿Yukito y tú están en la misma clase?"

"No, Yuki y yo fuimos separados. No pudimos hacer nada para evitarlo."

"Ah, qué mal."  'Desearía estar en la misma clase que Yukito...' pensó Sakura.

Fue entonces cuando ambos pudieron escuchar a su padre llamándolos para cenar.

"¡Sí!" dijeron ambos.

~*~*~*~*~

Esa noche Touya se acostó en su oscuro dormitorio, con ambos brazos detrás de su cabeza. Varias imágenes volaron a través de su mente.  El trabajo, la escuela, el fútbol, Yukito...Yukito. Recordó las numerosas veces que había estado a punto de confesar sus sentimientos a su amigo. Siempre había algo que lo detenía. 'Quizá sea una señal,' pensó. Se preguntó si alguna vez tendría la oportunidad de decirle a Yukito cómo se sentía realmente.

Desde la primera vez que vio al sonriente chico, había podido sentir algo especial sobre él. Tenía una extraña aura a su alrededor que intrigó a Touya, y lo hizo darse cuenta de que Yuki no era lo que aparentaba ser. También sintió algo extraño en su interior. Ambos se hicieron amigos rápidamente y comenzaron a salir juntos muy seguido. Cada día, Touya sentía como se enamoraba cada vez más y más de su amigo. Sin embargo, no sentía ninguna reacción de parte de Yukito. ¿Sentiría él lo mismo? ¿O sería lo contrario? ¿O quizás completamente indiferente? La verdad, Touya no tenía ninguna pista. Supo que tendría que revelar sus sentimientos pronto. Quería ver a Yukito como algo más que un amigo, y a cambio quería lo mismo. Quería acariciar suavemente al otro chico y sentir sus labios sobre los de su amigo.

No, no importaba cuál fuera la reacción de su amigo, debía decirlo para estar en paz. Touya pensó largo y tendido, y decidió enfrentar a Yukito la tarde del Miércoles, cuando ambos tuvieran algo de tiempo libre después de clases y fueran a comer algo. Touya suspiró.  Eso era todo. No importaba *qué* tratara de interrumpirlos. Él *enfrentaría* a Yukito ese día. Con aquello listo, rodó un poco sobre la cama y se quedó profundamente dormido.

~*~*~*~*~

Era la última clase del día, y Touya no podía concentrarse. Continuó mirando su libro de Cálculo como si estuviera escrito en otro idioma. '¡Basta!' pensó.  'Sólo son simples derivados. 4x^2 + 3x - 4 = dy/dx 8x + 3.  Ya, no estaba tan difícil. 5x^8 - 6x^3 + 5 = dy/dx Yuki.' Miró nuevamente la página. 'Idiota.' Borró el derivado incorrecto, pero no intentó buscar la respuesta correcta. 'Cálmate, Touya. Has hecho esto antes. No es tan difícil.  De todos modos, Yuki tampoco podría resolverlo.' "¡¡Maldición!!" exclamó sin darse cuenta. El grupo entero estaba mirándolo. "Hmmm...Creo que no era la respuesta correcta..." dijo, quedamente, con una gran gota de sudor.

~*~*~*~*~

Después de clases, Touya buscó a Yukito entre los estudiantes que salían hacia su casa o hacia sus respectivos equipos. No pudo encontrarlo, así que decidió buscar en los lugares donde solían reunirse para hablar.

Mientras se volteaba para ir a cierto árbol, vio lo que estaba buscando. Estaba a punto de llamar a su amigo, cuando vio a una chica corriendo hasta llegar donde Yukito estaba esperando. No la conocía. Pensó que su nombre era Tachikawa algo. Su cabello largo y verde estaba peinado en una media cola. Entonces la reconoció, era una estudiante de tercer año y estaba en el salón de Yukito. Ella tenía un pequeño regalo entre sus manos, y estaba sosteniéndolo nerviosamente. Touya supo lo que estaba sucediendo. Alguien iba a adelantársele.

"Hmmm...¿Tsukishiro?" preguntó la chica, nerviosamente.

"¿Si, Tachikawa?" dijo Yukito, sonriendo.

"Esto...es...¡Para ti!" dijo mientras ofrecía el paquete.

"¡Gracias!" dijo Yukito felizmente. "¡Oh, galletas! Me fascinan las galletas."

Todo lo que la chica pudo hacer fue sonrojarse y mirar hacia el piso. "Yo he...hmmm...querido hablar contigo desde hace tiempo."

"¿Eh?"

"Sí. Te he conocido bastante bien desde el año pasado...Y, ehh, desde entonces he tratado de reunir el suficiente coraje para decir que...Me gustas."

Todo lo que Yukito pudo hacer fue observarla con los ojos muy abiertos. Ella lo miró con expectación.

Él trató de sonreírle. "Lo siento, Tachikawa. No es que no me agrades...Creo que podríamos ser muy buenos amigos, pero no puedo pensar en ti de otra manera. Perdóname."

Varias lágrimas comenzaron a formarse en sus ojos. "Está bien, Tsukishiro. Lo entiendo. La chica que te gusta es muy afortunada."

De pronto ella salió corriendo de la escena, tratando de no sollozar muy fuerte. Entonces, vio a Touya cerca de ahí. Sus ojos se abrieron, aún más, al darse cuenta. '¡Kinomoto! ¡Por supuesto!'

Touya vio a la chica mientras pasaba junto a él. Pudo ver el dolor en sus ojos. Había visto la misma escena muchas veces. Por lo visto tenía muchas admiradoras en la escuela. Se sintió mal por haber roto el corazón de todas ellas.

Después miró a Yukito. El chico de lentes seguía ahí. Los nervios de Touya fueron en aumento, y comenzó a sentirse un poco mareado.

"To-ya..."

"Yuki..." Caminó junto a su amigo. "Sé que debes sentirte mal, pero no hay nada más que puedas hacer."

"Debe ser horrible estar enamorado de alguien que no te corresponde."

Touya sólo lo miró.'Sí, no tienes idea,' pensó.

Los dos amigos dejaron la escuela y se dirigieron al restaurante que les gustaba a ambos.

~*~*~*~*~

Después de que Touya terminó su plato de ramen, y Yukito hubo arrasado con seis platos grandes de lo mismo, Yuki insistió en terminar la tarde con algo de helado.

"¿Cómo es que comes tanto y no te enfermas?"

"Tengo un buen metabolismo," dijo Yukito, sonriendo.

"Sí...Lo que digas."

Ambos entraron en un parque. No había mucha gente, por lo tanto tenían mucha privacidad. Touya sugirió descansar en una banca. Los dos terminaron viendo un hermoso atardecer.

Touya miró a su feliz amigo comiendo su helado antes de que se derritiera. Se veía tan hermoso. Especialmente la manera en la que el sol hacía brillar sus facciones.

"Yuki..." Touya casi murmuró.

"¿Si?" dijo su, siempre sonriente, amigo.

"Escucha, no sé cómo vayas a reaccionar a lo que voy a decir, pero decidí hacerlo de todos modos." Miró profundamente a su amigo, directo a los ojos. "Tú...me...gustas." Touya pudo sentir cómo sus mejillas ardían. Evitó la mirada de Yukito. Eso era todo. No había vuelta atrás. Aceptaría las consecuencias.

Pudo sentir una mano posándose sobre la suya. De pronto alzó la mirada, con sorpresa.

"Touya, ya lo sabía," dijo Yukito tranquilamente.

Touya continuó observándolo.

"Lo veo en tus ojos cada día, en la manera en que me hablas, la forma en que actúas frente a mí. Espero haber mostrado lo mismo por ti todo este tiempo. Yo también te amo."

¿Había oído bien? "Yo también te amo." Aquellas palabras resonaron en su cabeza por varios segundos. Touya se había quedado sin palabras. Era como un milagro.

"Yuki, yo..." Pudo sentir la mano de Yukito tomando suavemente la suya. No pudo resistirlo. Se inclinó un poco, sus rostros estaban pocos milímetros separados. Cerró los ojos y disfrutó la maravillosa sensación que siguió. Los labios de Yukito eran suaves y un poco cremosos. Pudo saborear el helado de fresa que Yuki había estado comiendo. Colocó sus manos alrededor de la cintura de su pareja y lo atrajo hacia sí.

Después de lo que pareció poco tiempo, Touya rompió el beso. Miró cariñosamente a su amigo.

"Supongo que esto cambia las cosas un poco."

"Sí," respondió Yukito. Después de una breve pausa, volvió a hablar. "¿Crees que debamos decirle a los demás?"

Sakura. Su padre. Sus amigos. Sus compañeros de clase. Había un gran número de personas que tarde o temprano se darían cuenta. "No lo sé..." Pensó por un momento. "Sakura debería saberlo. También papá. Y tus abuelos."

"Tienes razón," dijo Yukito. "Pobre Sakura. ¿Cómo crees que reaccionará?"

"No estoy seguro. Ella se muere por ti, lo sé. Seguramente tendrá el corazón roto por algún tiempo; pero, conozco a Sakura, sé que podrá aceptarlo con el tiempo.

"Eso espero." Yukito parecía un poco deprimido.

"¿Qué sucede, Yuki?"

De pronto volvió a sonreír. "Oh, nada. Sólo espero que tengas razón."

Touya dudó, y después comenzó a hablar. "¿Te importaría si esperamos un poco para decirlo? Así tendremos tiempo para nosotros, sin tener que pensar en los demás."

"Por supuesto. No deberíamos decirlo hasta que nos acostumbremos el uno al otro. Creo que mientras más cómodos estemos, mejor estarán las cosas."

Touya asintió. La pareja se quedó en la banca por un buen rato. Ambos disfrutaron el abrazo del otro, y el amor que ahora cubría su relación.

~*~*~*~*~

Pasaron muchas semanas de pura felicidad para la pareja. Ambos reconocieron que se habían quitado un gran peso de encima, pues ahora sus sentimientos habían sido revelados. Era una sensación de libertad que nunca antes habían experimentado. El tiempo que pasaban juntos era precioso, y el amor era expresado a través de una sonrisa, de una mirada, de una caricia  o de una palabra. En la escuela, sabían que debían limitarse, pero se las arreglaban para encontrarse en los alrededores.

Como muchas otras noches, Yukito estaba en la residencia Kinomoto, para cenar. A Fujitaka no le molestaba, pues Yukito era una visita muy agradable.

"¡Gracias por la comida!" exclamó un coro de voces.

"Se ve delicioso," dijo Yukito, refiriéndose a la comida hecha por Fujitaka.

"Gracias," dijo el amable hombre. "Sé que comes bastante, Yukito, así que puedes servirte todo lo que quieras. Preparé bastante."

"¡Sí, sabe delicioso!" dijo Sakura con entusiasmo.

"Monstruo," Murmuró Touya. "Odias la carne con curry."

"¡Claro que no!" Sakura estaba completamente sonrojada.

Todo lo que Yukito pudo hacer fue reír ante la escena. Aquello le era muy familiar. Y esperaba ser parte de eso para siempre.

~*~*~*~*~

Después de la cena, la familia bebió café en la sala y pasó el tiempo charlando sobre varios temas. Se hizo tarde, y Sakura fue llevada a su habitación por su padre. Yukito aprovechó la oportunidad para retirarse, diciendo que era hora de irse a casa.

Cuando Touya estuvo seguro de que su padre estaba arriba, sujetó a su amigo, y lo besó fuertemente en los labios.

"¡Touya!" dijo un sorprendido Yukito.

Touya lo miró seductoramente. "Me moría por hacer eso.”

Yukito colocó sus brazos alrededor de la cintura de Touya. Rió un poco. "Pero, ¿no es un poco peligroso?"

"Quizá, pero es más divertido así." Con una sonrisa, Touya se acercó por un segundo beso, más apasionado. No escuchó los pasos en las escaleras.

Fujitaka caminó por el pasillo y se quedó sin palabras ante la impactante escena. Con un poco de rubor sobre las mejillas, se dio la vuelta, y dejó tranquila a la pareja.

Después del largo beso, Yukito dijo, "Debo irme..."

"Lo sé, pero necesitaba algo para recordarte." Touya acarició suavemente el rostro de su pareja. Después, acompañó a Yukito hasta la puerta.

"Te veré mañana, ¿sí?" preguntó Yukito.

"Sí, iré por ti a las cinco. Tengo los boletos para el concierto de Asakawa Hiroko. Comienza a las ocho, así que primero iremos a comer algo."

"¡Suena maravilloso!" Mientras Yukito se despedía, Touya dijo en voz baja 'te quiero' y después cerró la puerta.

Touya suspiró. Quería que fuera mañana lo más pronto posible. Caminó hacia la sala, y llevó los trastes a la cocina. Mientras estaba haciendo aquello, se sorprendió al escuchar la voz de su padre.

"Touya, ¿puedo hablar contigo un momento?"

"¿Ehhh? Claro, pero estaba a punto de irme a dormir..."

"Es importante."

Touya asintió, y se sentó junto a su padre en la sala.

"Felicidades," dijo Fujitaka.

Touya lo miró fijamente. No tenía idea de lo que estaba pasando.

"Veo que Yukito y tú por fin son pareja"

La mandíbula de Touya estaba prácticamente sobre el piso. Sus ojos estaban abiertos de par en par, y tenía una gota de sudor enorme en la cabeza.

 "Pues, sí...¿Cómo supiste?"         

Fujitaka sólo sonrió. "Para los padres es fácil darse cuenta. Por la manera en que actúan cuando están juntos, supe que algún día sucedería. Estoy feliz de que al fin formalizaran su relación."

"Entonces...¿Estás de acuerdo?" preguntó Touya, con cautela.

"Por supuesto, ¿por qué no debería estarlo?" Touya estaba impresionado. "Aún así, hay algo que quiero discutir contigo. Lamento no haber hablado sobre esto antes, creo que te he dado suficiente información. Es sólo que no lo había pensado."

Touya tenía el tono de rojo más fuerte sobre su cara. *No estaba* teniendo esa conversación con su padre. *No podía* tener esa conversación con su padre. “Está bien, papá.  Sé muchas cosas..."

"Pero sólo quiero asegurarme." Touya estaba seguro de que moriría. "No sé si ya eres sexualmente activo..." Touya sacudió la cabeza, casi con violencia. Estaba muerto. Muerto. Muerto. Muerto. "Pero seguramente lo serás pronto."

Aún más muerto. "Sólo quiero asegurarme de que estás usando protección."

Touya descubrió que no podía hablar. De hecho, no pudo hacer nada más que sufrir por esa sensación de vergüenza y estar al borde de la muerte.

"Confío en Yukito y en ti más que en nadie, pero se me ocurrió que no tendrías la suficiente información."

Touya pudo pronunciar varias palabras. "No te preocupes, papá. Contamos con toda la información. Estaremos bien."

"Es bueno saberlo," dijo su, aún, sonriente padre. "Ahora, estaba pensando en otras cosas. ¿Vas a decirle a Sakura?"

"Sí, Aunque decidimos esperar un poco. ¿Qué opinas?"

"Está en ti decidir lo que sucederá. Has lo que creas conveniente. Aunque debes tomar en cuenta que no seré la única persona que descubrirá la verdad sin ayuda."

Touya pensó sobre eso por un minuto, y supo que su padre estaba en lo correcto. Aquel pensamiento lo asustó. "¿Está bien si me voy ahora?"

"Claro," respondió su padre. "Espero que te diviertas en tu cita de mañana. Sé que probablemente te quedarás en la casa de Yukito, y estoy de acuerdo."

Touya no pudo evitar ruborizarse. Simplemente asintió y subió las escaleras.

'Quedarme en su casa.' Su padre debía estar pensando en que algo iba a suceder. Touya tuvo que admitir que pensaba lo mismo. 'Bien,' pensó, 'pasará lo que tenga que pasar’.

~*~*~*~*~

<<Ding dong>>

"¿Si?" preguntó una voz en el intercom.

"Soy Kinomoto."

"Hola Touya. Yukito saldrá pronto."

Touya sonrió un poco. Yukito tenía una maravillosa abuela.

Yukito salió corriendo de la casa. "¡Hola, To-ya!"

Touya tuvo que resistir la urgencia de abrazar a su amigo ahí mismo y darle un profundo beso en los labios. Tuvo que tranquilizarse. "Yuki."

"Déjame guardar tu mochila dentro de la casa." Yukito corrió al interior, y después volvió a salir. Ambos caminaron hacia la estación del tren. "Oh, adivina qué," dijo Yukito. "Mis abuelos estarán fuera por una semana."

"¿Eh?"

"Sí, se quedarán con mi tío en Kyoto. Se irán esta noche..."

"¿En serio?"

"Sí."

Hubo un molesto silencio.

"Así que el concierto será divertido, ¿eh?", dijo Yukito, entusiasmado.

"Eso espero. Realmente quiero ver a Asakawa cantando en persona."

Más silencio.

"¿Yuki?"

"¿Sí?"

"Papá sabe."

Yukito dejó de caminar por un segundo. Colocó su mano en el brazo de su pareja. "¿Estás bien? Dime qué pasó."

"No, no, él está de acuerdo..." Yukito pareció aliviado. "Aunque no tanto..."

"¿A qué te refieres?"

"Pues..." Touya comenzó a sonrojarse de nuevo. Tenía problemas para hablar sobre el tema. "Él sólo quería asegurarse de varias cosas...Como que estuviéramos protegidos."

Yukito miró a su amigo, confundido. Después sus ojos se abrieron de par en par y se ruborizó. Touya trató de mirar hacia otro lado y ver algo en la distancia.

"Oh...Ya veo."

Ambos se detuvieron por un momento, inseguros sobre lo que el otro estaba pensando o en cómo reaccionar.

De pronto  una sonrisa apareció en el rostro De Touya. "Pero olvidémonos de todo esto y divirtámonos."

Yukito también se relajó."¡Sí!"

Y continuaron como antes, caminando y charlando.

Sólo que esta vez la desagradable sensación se había ido. Estaban en camino para una maravillosa noche llena de comida y música. No había nada más en sus mentes. Bueno, quizá *nada* más...

~*~*~*~*~

La puerta principal se cerró. Las luces comenzaron a parpadear en el pasillo. Ruidos de zapatos podían escucharse. Alguien entró en la sala y se arrojó sobre el sofá.

"Ah, estoy muy cansado."

"Bueno, quizá si no hubieras estado saltando y gritando durante todo el concierto..." dijo su amigo de cabello grisáceo.

"Cállate..."

"Voy a preparar algo de café; regresaré en un minuto."

El concierto había pasado en un parpadeo. Primero habían ido a un restaurante italiano, famoso por su lasaña. Por supuesto que Yukito había comido por diez personas. Touya no pudo hacer nada más que reír. Ese era *su* Yukito. Ahora que eran pareja todo parecía estar bien. Amaba todo de su amigo, desde sus excelentes modales hasta sus molestos hábitos. El concierto había sido igualmente agradable. Ambos eran fanáticos de Asakawa Hiroko, y se morían por verla en vivo.

"Aquí está," dijo Yukito mientras ponía el café sobre la mesa, frente a Touya.

"Gracias. Yuki, la pasaste bien esta noche, ¿verdad?"

"Sí, fue maravilloso. Sabes, To-ya, me la paso bien a donde quiera que voy contigo." El chico de cabello grisáceo se sentó junto a Touya y bebió un poco de café.

Era el turno de Touya para sonreír. Dudó un poco, pero colocó su brazo sobre los hombros de su amigo. El otro chico lo miró y sonrió, recargando su cabeza en el hombro de Touya. Estuvieron así por largo tiempo, disfrutando la compañía.

"Yuki..." dijo Touya, con voz forzada.

"¿Hmm?" Yukito estaba dormitando suavemente entre sus brazos.

"Qué pensarías...qué dirías si...te importaría..." Touya no podía decirlo. "¡Demonios!"

Yukito tenía una expresión preocupada en el rostro. "¿Qué ocurre, To-ya? ¿Hay algo que quieras decirme? Sabes que puedes preguntarme lo que sea." Yukito le sonrió cálidamente.

Touya miró a su pareja con gran amor. ¿Acaso alguna vez había soñado encontrar a alguien tan atento, paciente y compasivo? Se sonrojó profundamente."Pues...Estaba pensando si te gustaría hacer el amor..."

Yukito se inclinó y besó profundamente a su pareja. Con voz seductora, dijo, "creí que nunca lo preguntarías."

Era todo lo que Touya necesitaba para despojarse de sus inhibiciones. Colocó a Yukito sobre él, y ambos iniciaron una guerra de lenguas. Touya disfrutó la sensación de tener a Yukito encima de él. Usó ambas manos para acariciar el cabello y la espalda de su pareja.

Yukito tenía ambas manos sobre los costados de su amante y comenzó a levantar la camisa de Touya, el cual no ofreció resistencia, y comenzó a hacer lo mismo con Yukito. Muy pronto varias piezas de ropa estaban sobre el piso, y varios chicos se habían quedado en boxers. Ambos respiraban profundamente.

"Creo que ninguno de nosotros ha hecho esto antes," dijo Yukito.

"Supongo que hay una primera vez para todo. Estoy listo para un poco de exploración, ¿qué tal tú?"

Yukito sonrió. "Sí."

Yukito lo llevó a su habitación, y ambos se acostaron sobre el futon. Touya se arrodilló sobre su amigo. Comenzó su asalto frotando el pecho de Yukito con ambas manos. Realizó pequeños círculos y puso especial atención en los dos pezones erectos. A medida que el masaje avanzaba, Touya bajó más y más sobre el cuerpo de su pareja. Hasta que llegó al borde de los boxers. Los miró por un momento, y los retiró con un sólo movimiento. Y ahí, expuesta, estaba la vista más bella que Touya jamás había tenido. El miembro de Yukito estaba semi-erecto y calentándose a cada segundo.

Touya miró por un momento a su amigo. Yukito asintió. Touya comenzó frotándolo con ambas manos. Obtuvo varios gemidos por parte de Yuki en respuesta. Aceleró la marcha moviéndolo un poco. Esto provocó aún más quejidos. Finalmente, el pene estaba completamente erecto, Touya se agachó sobre su amigo. Lo lamió y mordió ligeramente por toda su longitud. Profundos gemindos podían ser escuchados. Touya usó ambas manos para acariciar el trasero de su pareja y para tocar sus testículos. Continuó lamiendo más rápida y profundamente. Cada movimiento era respondido por las caderas de Yukito.

"To-ya..." gimió Yukito. "¡Más rápido, por favor....ah! Por favor, no te detengas...To-ya, voy a..."

Touya se percató de lo que iba a suceder y dejó caer el semen dentro de su boca. La cálida carne de Yukito explotó varias veces, y Touya tuvo que esforzarse para mantenerlo todo bajo control. Cuando hubo terminado, Yukito dejó escapar un largo suspiro.

"Eso fue, eso fue...¡No puedo describirlo! ¿Cómo fue que te volviste tan bueno?"

Touya sólo lo miró, con orgullo. "Tengo un par de trucos bajo la manga."

Después de una pausa, Yukito tomó la iniciativa, y comenzó a besar a Touya en el cuello y en los hombros. Se detuvo un par de veces para morderle el lóbulo de la oreja. Mientras estaba haciendo esto, tocó ligeramente el miembro de Touya a través de sus boxers. Touya estaba completamente excitado. Yukito pudo sentir aquel calor presionando contra él. Besó apasionadamente a Touya en la boca varias veces, antes de concentrarse en la zona sensible de Touya.

Yukito observó la magnífica pieza de hombre que estaba frente a él. "Veamos si puedo hacer lo mismo..." Comenzó a lamer el pene de su pareja desde la punta, lentamente. Cubrió el miembro entero con su saliva. Touya estaba acostado, con los ojos cerrados, disfrutando las sensaciones. Yukito llevó la punta dentro de su boca, y comenzó a moverse lo más rápido que pudo. Un profundo gemido escapó de los labios de Touya. Yukito también usó su lengua mientras se movía de arriba hacia abajo, lo cual dio placer extra a Touya.

Yukito disminuyó el ritmo un poco, y acarició la entrepierna de Touya, éste no pudo  hacer nada más que levantar las caderas de la cama y tratar de sumergirse en la boca de su amigo. Pudo sentir una extraña sensación en su interior. El placer era más frecuente y de mayor intensidad. Gruñó y forzó a Yukito a ir más rápido, marcando el ritmo con sus caderas.

"Ah, Yuki..." Esas fueron las únicas palabras que Touya pudo pronunciar después de venirse y sentir como la sangre era liberada de su cuerpo. Cerró los ojos y comenzó a respirar suavemente. Una ligera brisa entró por una de las ventanas, se sintió bien sobre su piel ardiente.

Yukito se acostó junto a su pareja. Touya deslizó sus brazos alrededor de su pareja.

"Te quiero."

"Yo también."

~*~*~*~*~

Al día siguiente, la pareja fue a la escuela, como siempre. Sin embargo, tropezaron con una enorme dificultad para pretender que no eran nada más que amigos. Querían tomarse de la mano. Pero más que nada, querían que los demás supieran cuánto se amaban.

Sin embargo, muchos de los estudiantes notaron 'algo' entre los dos. Algunos pensaron que no era más que amistad. Otros pensaron que eran lazos de hermandad. Otros pudieron ver a través de lo que aparentaban, e imaginaron su relación.

Touya, siendo el capitán del equipo de fútbol, era uno de los hombres más respetados y populares de la escuela. Nadie se atrevería a decir nada sobre él, porque sabían que tenía

muchos aliados que lo protegerían, sin importar qué. Sucedía lo mismo con Yukito. Aunque no pertenecía a ningún equipo, apoyaba a varios de ellos y tenía muchos amigos.

A la hora del almuerzo, ambos estaban sentados en el pasto, comiendo, como siempre. Estaban ocupados, riendo y charlando, y no miraron a la chica que se aproximaba.

"Disculpen."

"Oh, Maron," dijo Yukito.

"¿Les importa si me siento con ustedes?”

Ambos hombres compartieron una mirada.

"No, está bien," dijo Touya, con un poco de precaución.

Los tres charlaron sobre asuntos relacionados con la escuela por un momento. Cuando, de pronto, Maron cambió el tema.

"Oigan, los conozco desde hace más de dos años, ¿cierto?"

"Sí" dijo Yukito.

"Y te conozco a ti, Touya, desde la secundaria."

"Sí..."

"Así que, somos buenos amigos, ¿verdad?"

"Claro, Maron, ¿cuál es tu punto?" preguntó Yukito.

"Es sólo que...estaría bien si me contaran algo sobre ustedes." Su rostro estaba completamente enrojecido.

Touya y Yukito la miraron por algunos segundos, y después se miraron entre sí.

"¿A qué te refieres?" preguntó Touya.

"Creo que ustedes saben a qué me refiero," dijo con voz suave. "¿Qué tal si yo empiezo? ¿Conocen a Miyako de la clase 3-A?"

"Por supuesto," dijeron ambos.

"Pues...Ella y yo..."

Los ojos de Touya se abrieron de par en par.

"Nos amamos," dijo ella con voz alegre.

"¡Felicidades!" dijo Yukito, sonriendo. "Pero, ¿por qué estás diciéndonos esto?"

"Sólo quería que supieran que no están solos. Ustedes tienen amigos que lo apoyarán sin importar qué. Y quería decirles que pueden hablar con Miyako y conmigo cuando quieran. Honestamente, creo que podremos aprender mucho si hablamos sobre nuestras relaciones.”

Yukito tomó la mano de Touya. "Te lo agradezco mucho. Es grandioso saber que te preocupas tanto por nosotros. Nos hemos roto la cabeza tratando de mantener esto en secreto. Aún cuando no queremos que toda la escuela lo sepa, es maravilloso compartir nuestra felicidad con los amigos."

Touya agregó, "Y creo que podría interesarnos hablar con Miyako y contigo. Seremos capaces de darnos consejos los unos a los otros. Gracias, Maron. Siempre has sido una gran amiga."

Ella sonrió y asintió. "No hay problema. Yo sé lo que es pensar que estás solo en el mundo.¡Sólo quería recordarles que tienen amigos! Bueno, gracias por dejarme almorzar con ustedes. Por cierto, siempre pensé que hacían linda pareja. ¡Hasta luego!" Ella hizo una ligera reverencia y caminó hacia Miyako y sus otras amigas.

"Bien," dijo Touya, "Supongo que papá tenía razón. Las demás personas se darán cuenta sin que se los digamos.”

"Pero se siente bien, ¿no? Saber que nuestros amigos nos apoyarán."

"Sí. Aunque sigo impresionado por lo de Maron y Miyako. Nunca lo hubiera adivinado."

Yukito picó a su amante en las costillas. "A veces no eres muy observador, ¿lo sabías?"

"Oye, creo que soy muy buen observador..." dijo mientras tomaba el rostro de Yukito entre sus manos, "...con las cosas que realmente me interesan."

"To-ya..." Yukito cerró los ojos y dejó que su amante deslizara la lengua dentro de su boca.

Ambos estaban en una zona bastante aislada y, por lo tanto, había pocas posibilidades de que alguien los viera. Sin embargo, había una parte de ellos que no se preocupaba, y estaban seguros al saber que eran aceptados por sus seres queridos.

~*~*~*~*~

Después de clases, Touya estaba en los vestidores, cambiándose para la práctica de fútbol. El resto del equipo ya estaba en el campo, pateando el balón. Mientras cerraba su casillero, y estaba a punto de salir, una mano lo detuvo por detrás.

"Kinomoto. Tenemos que hablar."

Era Yamaguchi Hiroya, miembro del equipo, y uno de los amigos más cercanos de Touya.

"¿Qué pasa, Yamaguchi?"

Hiroya se recargó contra los casilleros, con los brazos cruzados sobre su pecho.

"No es justo."

"¿Qué?" dijo un confundido Touya.

"Básicamente cada chica de la escuela está loca por ti, pero toda esa atención es desperdiciada, porque no hay manera de que le hagas caso."

Por segunda vez en el día, Touya estaba sorprendido.

"¿Oye, no vas a decir nada?"

"¿Cómo lo supiste?" Fue todo lo que Touya pudo decir.

"Por favor, uno debería estar ciego para no ver que hay algo entre Tsukishiro y tú."

Touya no sabía qué pensar. Por un lado, estaba horrorizado, porque aquello podría significar el final de su amistad con Yamaguchi, y el final de su carrera en el equipo. Pero, por el otro lado, su amigo no le estaba gritando ni nada, así que lo tomó como una buena señal.

"¿Y qué vas a hacer?" preguntó Touya, rudamente.

"Oye, relájate, Kinomoto. No voy a hacer nada. Personalmente, no puedo imaginarme el ser atraído por otro tipo, pero, oye, te apoyo." Palmeó a Touya en la espalda.

'Yamaguchi es un buen tipo,' pensó Touya. "Gracias. Por cierto, nunca tuve esa clase de sentimientos por ti o por cualquier otro miembro del equipo. Espero que no te sientas incómodo al respecto, pero nada ha cambiado realmente."

"Oye, soy un tipo de mente abierta," rió Hiroya. "Sigues siendo el mismo Kinomoto Touya, así que no veo por qué deba tratarte diferente. Sólo quería aclarar el aire entre nosotros. No quería que pensaras que debías mantener esto como un secreto para mí. Y quería que supieras que sigo estando de tu parte.”

"Eres un buen amigo, Yamaguchi," dijo Touya.

"Bah, sé que habrías hecho lo mismo por mí. Ahora," dijo Hiroya, lanzando un balón de fútbol a su amigo, "salgamos de aquí o llegaremos tarde a la práctica."

Touya no pudo evitar sonreírle a Yamaguchi. La aceptación que había tenido por parte de sus amigos era mayor de la que nunca hubiera imaginado.

  ~*~*~*~*~

Nuevamente Touya estaba acostado en una habitación oscura, con ambos brazos detrás de su cabeza. Sólo que esta vez estaba completamente desnudo y acompañado por su amante. Estaba considerando varias cosas, y su mirada estaba perdida en la distancia.

"To-ya," dijo Yukito con voz suave. "¿En qué estás pensando?"

"En hacerte el amor de una manera apasionada y sin control."

Yukito rió. "¿Tan pronto? ¡Pero si acabamos de terminar! En serio, parece como si algo estuviera molestándote."

Touya suspiró. Aquello había estado atormentándolo por un buen rato, había llegado el momento de discutirlo con su pareja.

"Estaba pensando en Sakura. Creo que es hora de que lo sepa."

"Estaba preguntándome cuando hablaríamos sobre esto. Sí, creo que estamos listos para decírselo. Como están las cosas, no me gustaría que se enterara por ella misma."

"¿Cómo crees que reaccione?" Touya tenía una expresión de verdadera preocupación en el rostro.

"No estoy seguro, pero es tu hermana. Te ama incondicionalmente, y siempre lo hará. Supongo que se sorprenderá un poco al principio, pero creo que no hay nada de que preocuparse. Estamos hablando de Sakura."

"Está bien, entonces está decidido. Ella es la última que queda. Mi padre lo sabe, tus abuelos ahora lo saben; son grandiosos, por cierto. Así que Sakura es la única que queda en la oscuridad. Creo que mañana será perfecto. ¿Qué dices?"

"Claro, mañana está bien para mí. Ahora," dijo Yukito con voz cálida, "creo que debo sacarte de ese humor tan serio..." Se colocó encima de su pareja. "Aún falta mucho para que la noche termine..."

Touya le sonrió a su amante. Se acercó a Yukito lo más posible, y le murmuró en el oído, "no te dejaré ir esta noche."

~*~*~*~*~ (no se preocupen, aún falta una escena lemon. ^_^)

"¡Aaaah! ¡Qué bonito día!" dijo una alegre Kinomoto Sakura, mientras se deslizaba por el camino en sus patines. El sol brillaba en el cielo, los pájaros estaban cantando, y el clima era cálido. Iba de vuelta a casa después de haber asistido a su práctica con las porristas. Sakura se había convertido en la estrella del equipo. Podía arrojar el bastón mejor que cualquiera, y era la que tenía mejor condición física. Adoraba a su equipo. Pues le ofrecía la oportunidad de estar con sus amigas, al mismo tiempo que disfrutaba el deporte.

Aunque, en ese momento, no estaba pensando en el equipo de porristas. Tomoyo la había invitado a su casa al día siguiente. También había invitado a Syaoran, lo cual extrañó a Sakura. Syaoran...¿Cómo es que ese niño se había convertido en una parte integral de su vida? Por supuesto, estaba el asunto de las cartas Clow y las cartas Sakura, pero, ahora todo había terminado. ¿Por qué continuaban saliendo juntos?

'Basta...' pensó para sí.'No puede ser...'No podía pensar en Syaoran de *esa* manera, ¿o sí? Después de todo, tenía a Yukito.'Yukito...' Cerró los ojos y colocó ambas manos sobre su corazón. Aunque Yukito era mayor, no podía evitar sentirse atraída hacia él. Era tan agradable y tan lindo a la vez.'Mi hermano tiene buen gusto para los amigos.'

Continuó su camino a casa, contenta porque al día siguiente iría a la casa de su amiga.

~*~*~*~*~

Touya esperó en el pasillo. Miraba el reloj continuamente. Habían pasado treinta segundos. Sakura llegaría dentro de poco, y estaba nervioso.

"To-ya," dijo Yukito, calmadamente. "No sirve de nada preocuparse tanto. Ven a esperar en el sillón, junto a mí". Yukito palmeó el asiento que estaba junto a él.

Touya estuvo a punto de decir algo, cuando escuchó la puerta principal abriéndose. Como un cohete, se disparó dentro de la sala y se sentó junto a su amigo. No quería que Sakura supiera que había estado esperándola.

"¡Ya llegué!" Gritó Sakura, mientras se quitaba los patines.

"Oye, monstruo, ven a la sala", dijo Touya.

Sakura caminó pesadamente desde el pasillo hasta la sala. Tenía una expresión furiosa en el rostro.

"¡¡¡Que no me digas monstruo!!!"

De pronto se percató de que Yukito también estaba ahí. Su expresión cambió completamente ante ese descubrimiento, e incluso olvidó por completo el insulto que su hermano le había dado..

"¡Ah, Yukito! No sabía que estuvieras aquí." 

Sakura trató de sonreír para ocultar su vergüenza.

"Buenas tardes," dijo Yuki, atentamente.

La niña caminó hasta el sillón que estaba frente a la pareja, y se sentó.

"¿Para qué me querías?"

Touya la miró y se sonrojó. Trató de contenerse, pero no pudo hacerlo.

"Ehmmm...Pues...Hmmm..." No podía decirlo.

Sakura dudó un poco. "¿Qué?"

Yukito decidió tomar la iniciativa.

"Oye, Sakura, quieres mucho a tu hermano, ¿verdad?"

Sakura estaba un poco confundida ante semejante pregunta.

"Pues...Sí, supongo. Aunque a veces puede ser un verdadero *dolor*"

"Por supuesto que puede serlo, pero esa es una de las razones para amarlo."

"¡Oye!" dijo Touya en protesta. Yukito sólo sonrió.

"Sakura, ¿qué sabes sobre el amor?"

Fue el turno de Sakura para sonrojarse profundamente. Colocó uno de sus brazos detrás de su cabeza.

"¿Amor? Pues, sé que cuando amas a alguien, es en lo único en lo que puedes pensar, y quieres pasar el resto de tu vida con esa persona. El amor puede ser realmente bello, como papá ama a mamá." Sakura no pudo hacer nada más que observar el hermoso rostro de Yukito.

"Eso es verdad, y el amor puede vencerlo todo, ¿cierto? Nada sería capaz de separar a dos personas que se aman."

"¡Por supuesto! Si dos personas se aman, nada o nadie podrá separarlos."

"Eso está bien," dijo Yukito. "¿Y estarás feliz por tu hermano cuando encuentre a alguien?"

Sakura pensó que la plática se estaba volviendo anormal. ¿Por qué estaba hablando de amor con Yukito? Todo parecía tan extraño, pero aún así respondió.

"Por supuesto que estaré feliz. Él es mi hermano."

"Bien, ¿qué dirías si él ya encontró a esa persona?"

"¡¿Eh?! Hermano...¿Es cierto? ¿Tienes novia?"

Touya tosió dentro de su mano. "Sí."

"¡Vaya...!" dijo Sakura, confundida. "¿Y quién es?"

Touya tomó la mano de Yukito. "Estoy justo aquí, Sakura," dijo el chico de cabello grisáceo.

Dolor. Un inmenso dolor. Su corazón estaba latiendo sin control. Su cabeza daba vueltas. Seguramente el mundo había perdido su eje. Sí. Se llevó una mano al pecho, y la otra sobre la cabeza. Estaba mirando fijamente a la pareja con una expresión confusa en el rostro. Nunca en su vida había estado tan confundida. '¿Yukito acaba de decir que es el novio de mi hermano? ¿Novio? ¡¡Yukito!'

Sakura estaba tan inmersa en sus pensamientos que no se dio cuenta de que estaba llorando. Touya se levantó del sillón y se arrodilló frente a ella. Tomó su mano, y le secó las lágrimas.

"Sakura...Lo siento. Lo siento."

A Sakura le tomó un minuto registrar lo que su hermano había dicho.

"Hermano...¿Has estado enamorado de Yukito todo este tiempo?"

"Sí."

"¿Por qué esperaste tanto para decírmelo?"

"No fue así...Llevamos poco tiempo como pareja. Quisimos esperar un poco, porque queríamos saber como reaccionaría la gente y además queríamos acostumbrarnos el uno al otro. Lo siento, Sakura. La última cosa que quería hacer era lastimarte. Pero creo que hicimos lo correcto al decírtelo."

"No, está bien," dijo Sakura, aún llorando un poco. "Estoy feliz de que lo hayas dicho". Miró hacia donde estaba el amigo de su hermano. "Yukito..."

Yukito tenía una expresión preocupada en el rostro. También se arrodilló frente a ella. "Sakura, quiero que sepas que siempre serás una de las personas más importantes en mi vida. Por favor, nunca lo olvides. No quiero perder nuestra amistad. Aún podemos salir juntos para comer helado y pastel, ¿cierto?"

Sakura sonrió un poco. "Está bien". Una parte de ella lloraba: 'No, ¡esto no es justo! ¡¡Amo a Yukito!' Pero otra parte, más racional, tranquilamente, dijo: 'Tu hermano está feliz, eso es lo más importante. Y hace tiempo que no pensabas en Yukito de “esa manera”. ¿Podrá ser que alguien más ha conquistado tu corazón?'

Mientras peleaba contra sus demonios internos, Sakura se atrevió a decir unas cuantas palabras. "Yo...Estoy un poco confundida ante esta noticia. Es decir, sabía que ustedes eran amigos, pero no tenía idea de que...Yo...Creo que necesito pensar un poco sobre esto...¿Está bien?"

"Claro," dijo Touya. “Pero no estás ofendida, ¿verdad?"

"¿Qué? ¿Por qué debería estarlo? Hermano, crecimos con los amigos gay de papá viniendo a casa muy seguido. Créeme, no me preocupa el que ambos sean hombres."

Touya dejó escapar un profundo suspiro al tiempo que Yukito reía.

"Gracias, Sakura, es bueno saberlo," dijo Yukito.

Sakura mostró una enorme sonrisa y, sinceramente, dijo "¡Felicidades!"

~*~*~*~*~

Touya abrió lentamente la puerta de la habitación de Sakura. Ella se había acostado varias horas antes, pero quería verla. Estaba un poco preocupado por la reacción de su hermana. Sakura parecía casi alegre, pero él sabía que ella había tratado de esconder el dolor que debía estar en su corazón.

Sakura parecía estar durmiendo pacíficamente. Touya se dio la vuelta para salir, pero escuchó una voz:

"¿Hermano, eres tú?"

"Sí. ¿Por qué estás despierta?"

"Yo...No puedo dormir. He estado pensando en muchas cosas."

Touya se sentó al borde de la cama y la miró.

"¿En qué piensas?"

"Pues...en Yukito," dijo Sakura, tratando de disimular el rubor en sus mejillas.

"Sé que esto debe ser duro para ti. Desearía que hubiera otra manera, pero pensamos que merecías saber la verdad. Lo siento, no queríamos hacerte sufrir. Supongo que debes sentir como si hubieras perdido a alguien muy importante."

Sakura negó con la cabeza. "En parte. Pero estoy muy sorprendida de mí misma. No tomé la noticia como pensé que lo haría. Para serte sincera, hace tiempo que no pensaba en Yukito. Pero antes, el tan sólo imaginar en perderlo, me asustaba muchísimo, porque creí que realmente lo amaba."

Touya le sonrió. "Cuando eres joven, puedes confundir el amor de muchas maneras. No pretendo conocer tus sentimientos, pero quizás alguien más ya haya conquistado tu corazón".

Sakura se sonrojó profundamente. "Yo...No lo creo." 

Estaba mintiendo, y su hermano lo sabía. Le guiñó el ojo.

"Lo que digas, monstruo."

Sakura se sentó en la cama. “¡¡No soy un monstruo!!"

Touya colocó una mano sobre su frente. "Tienes razón. Te estás convirtiendo en una hermosa señorita. Sakura, habla conmigo cuando tengas problemas, ¿sí?"

"Está bien." Sakura estaba mirando a su hermano mayor en ese momento. Él cuidaría de ella. Siempre lo haría. Este pensamiento la reconfortó, y la hizo sonreír.

"No es hora para que una niña continúe despierta." 

"¿Qué? ¿Primero soy una señorita y ahora soy una niña pequeña? ¡No es justo!"

Él suspiró. "Sólo duérmete. Buenas noches."

"Buenas noches, hermano. Gracias...Te quiero."

Touya sonrió. Cobijó a Sakura y salió de la habitación, cerrando la puerta tras de sí. 

~*~*~*~*~

La luz de la luna caía sobre la residencia Tsukishiro. Los grillos podían escucharse ligeramente, al igual que un perro solitario que aullaba a lo lejos. La bicicleta de Touya estaba apoyada junto a la casa. Dentro, podía verse una luz en la ventana del baño.

Touya dejó escapar un suave gemido mientras se acomodaba en la tina. Cerró los ojos y se puso una toalla sobre la cabeza. Sus músculos estaban adoloridos por el entrenamiento de fútbol. El agua caliente lo relajaba completamente, y lo hizo adormecer.

"Touya," dijo el chico que estaba junto a él, "no puedes dormirte. Lo tengo todo planeado para esta noche. Después de todo, mis abuelos no suelen salir muy a menudo." La mano de Yukito trazaba suaves círculos sobre el pecho de Touya. Parecía bajar cada vez más.

Una sonrisa apareció en el rostro de Touya. "Una estrella de fútbol necesita descansar."

Una expresión determinante se apoderó de Yukito. "No creo que sigas diciendo lo mismo después de esto." Su mano tomó el miembro de su amante, y comenzó a moverlo de arriba a abajo.

"Mmmm, tienes razón. Retiraré lo dicho." Touya bajó la voz aún más. “Te haré parte de mí esta noche." Se acercó a su amigo y lo besó apasionadamente. Poco después comenzó a morder y a lamerle el cuello.

"Si seguimos así," rió Yukito, "ambos nos ahogaremos. ¿Por qué no vamos a un lugar más cómodo?."

Touya casi se quejó cuando Yukito soltó su sexo, pero estaba seguro que mejores cosas estaban por venir. Cuando salieron de la tina, se secaron mutuamente, creando una especie de danza erótica.

Una vez en la habitación de Yukito, se arrojaron a los brazos del otro. Después de bastantes minutos de acariciarse y besarse, Yukito quería pasar al siguiente nivel.

"¿Estás listo?"

"Definitivamente." Touya aprovechó la oportunidad para besar a su amante antes de acostarse en la cama. Pudo sentir como el lubricante era aplicado por Yukito, que no quería lastimarlo.

Yukito abrió el paquete de condones y colocó un látex sobre su miembro. Aunque ninguno de los dos tenía otras parejas sexuales, nunca se estaba realmente seguro. Cuando terminó, se aplicó un poco de lubricante.

Yukito miró a su pareja, que estaba sobre sus manos y rodillas."¿Estás cómodo?"

"Estoy bien, no te preocupes. Pero no podré esperar por más tiempo."

Yukito pudo ver, por el miembro erecto de Touya, que no estaba mintiendo. Suavemente se colocó frente a la entrada. Con un suave movimiento lo penetró hasta el fondo. Touya sujetó fuertemente las almohadas, por el dolor, y cerró los ojos.

"¿Estás bien?" preguntó Yukito, preocupado.

Lentamente, Touya dejó las almohadas, mientras el dolor disminuía. "Sí, estoy bien. Mmmm, Yuki, se siente bien. Dame fuerte."

Yukito sonrió. "¡Sí!" Sujetó a Touya por las caderas, y comenzó a moverse dentro y fuera. El lubricante estaba funcionando de maravilla, haciendo el trabajo más fácil. Yukito sonrió de pronto, y se dio cuenta de que había otra manera. Con la mano derecha, tomó el miembro de Touya, y comenzó a moverlo a la misma velocidad.

Los ojos de Touya se abrieron aún más al sentir el nuevo placer. "Yuki...eres sorprendente," dijo, entre gemidos.

El placer que Yukito sentía estaba enloqueciéndolo. Su endurecido miembro se movía rápidamente dentro y fuera de Touya. Al mismo tiempo su mano continuaba trabajando sobre el pene de su amigo. Pudo sentir su miembro calentándose y el placer iba en aumento. Con cada movimiento, sus testículos chocaban contra el trasero de su amigo, volviéndolo casi loco. "Ugh, To-ya," gimió.

Mientras tanto, Touya pudo sentir el calor creciendo en su interior. La sensación de tener a Yukito dentro de él lo estaba enloqueciendo. También estaba consciente de su propio miembro. Estaba claro, para él, que el fin estaba cerca. "Yu...ki..."

De pronto, Yukito explotó dentro de su pareja. Lo cual envió a Touya al borde del éxtasis, y derramó su semen sobre la cama y en su pecho. Yukito se separó lentamente de su amante. Touya cayó sobre la cama, demasiado cansado como para hacer algo más. Después de quitarse el condón, Yukito se acostó junto a su amante, jadeando suavemente.

"¿Cómo estuvo?"

Touya respondió con un profundo beso.  "Tú, mi amigo, eres el mejor."

Yukito rió. "La próxima vez será mi turno."

"¿Quién dijo que habíamos terminado?" dijo Touya.

~*~*~*~*~

<15 años después>

Un auto azul se detuvo lentamente en el camino. Una figura salió, y caminó hasta la entrada de la casa. La puerta se abrió antes de que él pudiera hacerlo.

"¡Papá!" dijo un pequeño niño, de cinco años. "¡Bienvenido!"

"Ya regresé," dijo mientras levantaba a su hijo en brazos.

"¡Bienvenido!" dijo una voz desde la cocina.

El hombre de cabello grisáceo asomó la cabeza por la puerta. Fue recibido con la vista de su pareja vestido con un delantal. Sonrió, y caminó junto a él, poniendo los brazos alrededor de su cintura. "¿Qué hay de cenar?"

El otro hombre le dio un beso a su pareja en la mejilla. "Tu favorito."

"¡Mmm, delicioso! Por cierto, luces muy bien con ese delantal, To-ya."

"Sabes que sólo lo uso para ti, Yuki." Ambos estaban a punto de besarse cuando Taro, su hijo adoptivo, entró.

"¡Papá, papá, miren!" El niño sostuvo un dibujo de la familia frente a ellos.

Yukito se inclinó y palmeó a su hijo en la cabeza. "Es muy bueno, Taro. Gracias."

Taro señaló. "¡Mira, también dibujé a la tía Sakura y al tío Li!"

"Es maravilloso," dijo Touya, mientras sostenía el dibujo en el refrigerador, con varios imanes. "¿Sabías que ambos vendrán a cenar esta noche?"

"¿En serio? ¡Vaya!"

Entonces se escuchó el timbre, y Taro corrió para recibirlos. Una muy embarazada Sakura entró a la casa, con un preocupado Syaoran siguiéndola de cerca.

"Hola, Taro," dijo ella dulcemente. "Te traje un regalo." Sakura buscó dentro de su bolso y sacó varias tarjetas de anime.

"¡Waa! ¡¡Gracias!!" dijo un emocionado Taro.

"Vaya, monstruo, te vuelves más grande cada vez que te veo."

Sakura sólo rió. "Siento como si estuviera a punto de dar a luz."

"Li, llévala a la sala antes de que lo haga de verdad."

Syaoran asintió y lo hizo.

Después de que todos estuvieran sentados, y el café se hubo hecho, pudieron relajarse y charlar.

"¿Cómo van las cosas en el hospital, Kinomoto?" preguntó Syaoran.

"Bastante bien. Estamos muy ocupados en estos momentos, pero me encanta el trabajo y ayudar a la gente me hace sentir que vale la pena."

"Muy pronto iniciará el nuevo ciclo escolar, ¿no, Yukito?" preguntó Sakura.

"Sí. Recibiré a varios grupos de cuarto. Siempre es triste cuando los alumnos cambian de grado, pero espero ver rostros nuevos. ¿Y qué hay sobre ti, Sakura? Escuché que  continúas trabajando en tu condición."

Una expresión de enojo apareció en el rostro de Syaoran  "Sí. Me la paso diciéndole que se cansará, pero no me escucha."

"Pero," dijo Sakura, "he reducido mi horario y Tomoyo me hace descansar cada diez minutos. No se siente como si estuviera trabajando, después de todo. Oh, y después de que

tenga al bebé, Tomoyo lo tiene todo planeado. Incluso hay una guardería en el edificio, pero ella va a supervisar todo sobre mí. Es muy linda. Además *insistió* en conseguir todos los accesorios para el bebé."

"Vaya, Tomoyo lleva el rol de presidenta en la compañía de sus padres bastante bien, ¿eh?", dijo Yukito.

"Sí, parece estar hecha para el trabajo. Tengo mucha suerte al estar trabajando para ella".

Fue entonces cuando Touya notó que la cena estaba lista, y todos se pusieron de pie para probar la deliciosa comida.

~*~*~*~*~

Más tarde, esa noche, cuando Sakura y Syaoran ya se habían ido y Taro dormía ruidosamente en su cama, Touya y Yukito aprovecharon el tiempo para relajarse y disfrutar el resto de la noche en paz.

"Oye," dijo Yukito, "cuando nos conocimos, ¿pensaste que las cosas terminarían de esta manera?"

"¿Te refieres a 'felices por siempre?' Hemos tenido mucha suerte, ¿no? Primero fue la alegría de encontrarnos el uno al otro, y después la aceptación de nuestros amigos y familiares, después nuestra boda, y finalmente Taro. No tenía idea de que criar un niño brindara tanta felicidad. No estaba realmente preparado para eso."

Yukito miró su anillo de compromiso. "No cambiaría esta vida por nada en el mundo. Te amo, To-ya, y siempre lo haré."

"Aún en los tiempos difíciles, siempre hemos estado juntos. Yuki, te amo más de lo que pueda expresar."

Touya miró dentro de los ojos de su pareja, y tomó una de sus manos. Ambos se dieron un beso profundo y apasionado, que seguramente conduciría a otras cosas esa noche.

OWARI


          Terminado: El 8 de Agosto de 1999