Después
de unas horas de conversación...
-
Entonces, ¿lo quieres?
-
Creo, creo que sí, bueno, no estoy seguro ¡estoy confundido!
-
Y la razón por la que actuaste así fue por miedo.
-
Sí, no quería volver a ilusionarme para después caer, además creí que
nadie podía quererme, pensé que me engañaba, que jugaba con mis
sentimientos, él sabe de mi “historial” supuse que quería hacerme una
broma pesada pero no fue así, al parecer el en verdad me quiere.
-¿Y
que harás?
-
No lo sé, quisiera pedirle disculpas, pero tengo aún muchas dudas, no sé lo
que siento realmente, no sé que pasa conmigo.
-
Eso depende de ti, confía en tu corazón y recuerda que siempre te apoyaré,
soy tu mejor amigo, date tiempo para estar seguro de lo que sientes, no trates
de engañar a Sendoh o lo más importante a ti, tu mereces ser feliz.
-
Gracias Yohei, de verdad eres un gran amigo.
-
Sabes, la próxima semana hay un partido contra Ryonan ahí lo puedes ver y
hablarle.
-
Si, lo haré, aunque no se cómo, le debo una disculpa.
-
Piénsalo, ya debo irme, nos veremos
-
Si, hasta luego a Yohei. Gracias.
Casa de Sendoh.
-
¿Qué haré?, ¿lo llamo?, ¿ya habré hecho lo suficiente? ¿por qué fui
tan estúpido?, idiota, idiota, idota, no volverá a hablarme, lo perdí. Y si
me disculpo- toma el teléfono con la intención de llamarle, pero se
arrepiente- No, mejor no, dejare pasar unos días, mejor hablaré con él en
el próximo partido, no deseo perder su amistad, sino es que ya lo hice.