Capítulo 2: Soledad
¿Cómo permanecer en paz y sin dolor? ¿Cómo dejar atrás los recuerdos sin que mi espíritu se sienta herido...?
Hanamichi: Poco a poco abro mis ojos, sé que alguien está a mi lado, pues aún en la oscuridad puedo distinguir su silueta pero...¿Quién es? Sólo fue una fracción de tiempo en que la habitación es iluminada por la tenue luz de la luna y eso es suficiente para que lo reconozca....Rukawa está sentado en la cama al lado mío, viendo hacia la nada con una mirada tan inusual en alguien tan inexpresivo como él, se ve triste, quizá nostálgico, pero...¿Por qué? Parece demasiado absorto en sus pensamientos, me pregunto ¿dónde estará su mente en este momento?
***
Absorto al mundo que lo rodea el joven de ojos fríos observa al pelirrojo que descansa a su lado mientras medita en el estado en que estuvo horas antes.
Rukawa: ¡Vaya! ¿Qué pudo haberle ocurrido, como para dejarlo en este estado? //Involuntariamente posa su mano suavemente en la mejilla de Hanamichi, acto seguido la retira y levanta la mirada// Estaba tan diferente a sí mismo, no se comportaba como el estúpido fanfarrón que suele ser siempre, casi parecía pedir ayuda, como si toda su autoconfianza lo hubiera abandonado, se veía tan indefenso, como alguien a quien debiera proteger, daba la impresión de estar tan solo //en este punto la expresión tranquila de su rostro cambia para dar paso a una de nostalgia fácilmente reconocible en sus facciones//, tan parecido a mí que yo sólo pude abrazarlo y decirle que todo iba a estar bien, no sé que diablos me pasó, normalmente me hubiera ido sin más pero...No pude dejarlo ahí, no tratándose de él, Maldición ¿qué diablos estoy pensando?
Una voz le trae de vuelta a la realidad.
***
Hanamichi: Zorro, ¿dónde estoy?se sobresalta al escucharme, rápidamente su semblante vuelve a mostrar la frialdad habitual.
Rukawa: En mi casa.
Hanamichi: ¡¿Y que diablos hago aquí?!
Rukawa: Lo usual, fastidiarme la vida.
Hanamichi: -siento que la sangre se me sube a la cabeza al oír eso-Maldito zorro, ¿cómo te atreves a decir eso a un tensai?
Anticipándose a una pelea y sin gana alguna de discutir, Rukawa decide dejar que se tranquilice el pelirrojo, se levanta de la cama y sale de la habitación sin dar ninguna explicación.
Hanamichi: ¡Eh zorro! ¡¡Espera!! ¡No me dejes hablando...! ¿A dónde vas? ¡Maldición! Este zorro //Se levanta precipitadamente y sale tras él, sólo para encontrar que Rukawa está entrando a otra habitación, Hana apresura el paso y cuando está llegando a él Ru simplemente le cierra la puerta en la cara mientras murmura:
Rukawa: Duérmete idiota.
Hanamichi: ¡¡¿Pero quién te crees para darle órdenes al tensai!!? ¿Rukawa....? ¡¡Te estoy hablando.....!! ¡¡Contéstame!!!
Rukawa: Deja de molestarme, lo que quieras arreglar será mañana.
Hanamichi: ¿Mañana? ¿Crees que se va a hacer lo que tú dices? ¿Que hora es? ¿Zorro que hora es? ¿Zorro...? ¡¡¡¡Rayos!!!!!
Al no obtener respuesta comienza a caminar buscando la salida, baja unas escaleras, lo único que quiere es salir de ahí, mientras se dirige a la puerta va observando el lugar donde se encuentra.
Hanamichi: Todo está demasiado ordenado, se ve limpio, muy bonito lugar, pero tan carente de vida, parece que nadie habitara aquí, no sé por qué me sorprende, conociendo al zorro lo único que se puede esperar es un lugar tan frío como este, en cuanto al orden que impera no es de extrañar puesto que nunca esta aquí, yo creo que solo llega a su casa para dormir. Ahí esta la puerta, hora de irse...No puede ser...¡¡¿¿Cerrado??!! Maldición no se ven las llaves por ningún sitio //dice mientras observa alrededor suyo// ¿Qué hago ahora? No puedo preguntarle a Rukawa porque está dormido. ¡¡Rayos!! Pues creo que no me va a quedar más remedio que dormir aquí.
De este modo el pelirrojo se resigna a regresar a la habitación y descansar, ya que mañana planea que de uno u otro modo ese zorro le explique cómo es que llegó ahí.
Hanamichi: Aún no entiendo cómo es que estoy en la caza del zorro, lo último que recuerdo es que llegué a la cancha del parque, me sentí débil y justo cuando pensé que no iba a poder más escuche la voz de Rukawa pero...¿Qué me decía? Ya recuerdo, me hablaba sobre la soledad, se veía tan diferente, parecía casi humano// una ligera sonrisa aparece en su rostro// y sin embargo// la fugaz sonrisa desaparece de sus labios// se escuchaba tan triste que no me explico cómo, pero supe que me comprendía, vaya que curioso, después de eso solo recuerdo vagamente que todo se oscureció y que unos brazos me rodearon protectoramente, que algo me hizo sentir mejor, una voz muy cálida que me decía que todo iba a estar bien, sería él? ¡¡¡Naaaa, eso es imposible!! Ese zorro es incapaz de decirle palabras de aliento a nadie y menos aún de esa forma tan reconfortante, pero....¿Y si hubiera sido él? Naaa el cansancio hace que piense tonterías, mejor será tratar de descansar y no pensar en eso, no pensar más en lo ocurrido, al menos no por hoy.
Hay ocasiones que no queremos recordar, pues lo ocurrido sólo consigue hundirnos anímicamente, sin embargo la mayoría de esas ocasiones el subconsciente nos traiciona y los sucesos vienen por sí mismos, cobran fuerza y parece que volvemos a vivirlos, esto justamente es lo que le sucedía a Hanamichi a quien sus recuerdos venían sin quererlo, su infancia sin el cariño de una madre, el dolor al ver que el afecto de otras madres para con sus hijos, la reciente muerte de su padre y el rechazo de su familia quienes no quisieron saber nada ni tener nada que ver con un chico tan rebelde, definitivamente solo tenía a Yohei y a los otros chicos a su lado, fuera de ellos no le importaba a nadie, no tenía nada más que un vacío sólo quería alguien que estuviera junto a él, alguien con quien compartir su vida, ¿era acaso demasiado pedir?
Hanamichi: Tal parece que por mi larga lista de rechazos-que para el momento ya sumaban 51Sí pido demasiado al querer a alguien que esté conmigo.
Una vez más ese sentimiento de no merecer nada lo embargó.
Hanamichi: Quizá.....quizá Rukawa tenga razón al decirme que soy un tonto, ese debe ser el motivo por el que nadie, me acepta. ¿Qué tengo? ¿Qué tengo conmigo?las lágrimas asoman a sus ojos cafés una vez más y se convierten en su única compañía en esa noche.
En la habitación contigua el joven de ojos azules pasa la peor noche de su vida, el que fácilmente logra conciliar el sueño esta noche no puede dormir.
Rukawa: Al fin parece que ya se durmió, ¡¡vaya qué día!! Primero trato de concentrarme en mi entrenamiento y llega ese torpe, quien además de comportarse de forma extraña se desmaya y es preciso que lo traiga conmigo. ¿Preciso?...Bueno quizá no era indispensable pero no podía dejarlo tirado a mitad del parque, pero ¿por qué no pude hacerlo? No es mi estilo precisamente ser altruista, pero algo me impidió abandonarlo. Puede que el ver su estado me haya hecho recordar la soledad en que crecí, contando sólo con mi albacea y el básquetbol, es extraño, tal pareciera que mis mayores anhelos están ligados indisolublemente al básquet, el entrenar ha sido mi vida, mi motivación de seguir adelante, mi presente y la clave de mi futuro, y ahora además de eso, hizo que entrara a mi vida alguien que desde el primer día que conocí me impresionó, con esa forma de vivir tan apasionada, con la determinación que muestra para lograr sus objetivos, él está rodeado de personas que lo quieren y a quienes les preocupa lo que le ocurra, eso es algo que de lo que yo carezco, me encuentro solo, a veces quisiera que alguien me hiciera compañía en esta casa tan grande, tal como lo hace ahora Hanamichi, su sola presencia me hace sentir bien, aunque sea pasajero me agrada saber que no estoy solo, pero sé que únicamente es por esta noche pues mañana cada uno seguirá su vida por caminos separados y no hay nada que haga cambiar eso...Nada.
Sin embargo quizá el futuro próximo le guarde algunas sorpresas a Kaede, cosas que el no imaginó que pudieran ocurrir.
En otro punto no muy lejos de la casa de Rukawa un muchacho de ojos cafés y cabello negro intenta en vano comunicarse con el pelirrojo, se ve muy preocupado, aún sin saber lo que le ocurrió ese día a su amigo.
Yohei: Contesta, vamos Sakuragi contesta. .......... // el teléfono suena una y otra vez // ¿dónde se pudo haber metido? Normalmente cuando no llega a casa es porque esta conmigo o con otro de los chicos, pero ya les llamé a todos y no lo han visto en todo el día, me preocupa, sobre todo después de saber que Haruko lo rechazó, él es muy impulsivo y considerando que estaba tan obsesionado con ella no se de lo que pueda ser capaz. Aún no puedo creer que lo haya rechazado, él no lo merecía.
***FLASHBACK***
Yohei: Hola Haruko //la chica sigue caminando sin hacerle el menor caso// ¿Haruko? // insiste él //
Haruko: Eh??? Aah, hola Yohei.
Yohei: ¿Cómo estas?.... por tu expresión sé que algo no anda bien, y si lo que me temo es cierto entonces Hana va a necesitar un amigo que este con él.
Haruko: ...estoy bien
Yohei: ¿En verdad? Pues me vas a disculpar pero tu aspecto me dice lo contrario.
Haruko: Ay Yohei!! No sé, realmente me siento terrible, no se si deba decirte pero es que Sakuragi......
Yohei: ¿Qué hay con Sakuragi? // Su voz revela inquietud//
Haruko: Lo que pasa es que él me pidió ser su novia.
Yohei: ¿Y?
Haruko: Yo...le dije que no.
Yohei: -Apenas puedo escuchar tu respuesta, pero eso me basta para confirmar mis sospechas-¿Por qué?te pregunto al fin, no sin dejar de observar un rubor que invade tus mejillas y el nerviosismo latente en tu respuesta.
Haruko: Pues yo...yo le dije la verdad que lo quería como a un amigo y que además me gustaba otra persona.
Yohei: -¿Pero cómo demonios te atreviste a lastimarlo de esa forma?, pienso con rabia; y te pregunto con un tono tajante-¿Y cómo reaccionó?
Haruko: Pues bastante bien creo yo, le pedí que siguiéramos siendo amigos y él dijo que sí, pero después se marchó.
Yohei: -Clásico de Hanamichi el ocultar el dolor que siente Lamento tener que dejarte Haruko pero debo irme digo al tiempo que doy media vuelta.
Haruko: ¿Crees que logre perdonarme?
Yohei: -Volteo con una sonrisa en mi rostro y sin estar seguro de mis palabras te digo algo como que el no acostumbra guardar rencor o alguna bobería por el estilo y después me voy pensando como debe sentirse y donde puede estar.
***FIN DEL FLASHBACK***
Yohei: Con mil demonios, ¿dónde estas?
Mientras tanto una joven de ojos azules comienza a creer que ha perdido un amigo y eso le provoca un dolor agudo en su pecho.
Haruko: ¿Por qué me siento así? Sé que hice lo correcto, yo no amo a Sakuragi, aunque empiezo a creer que perdí a mi mejor amigo ¿Habré hecho lo correcto? ¡Cielos como me hace falta Sakuragi en este momento!
Las horas pasan rápidamente, quizás demasiado rápido para aquellos que buscaban encontrar alivio a lo que atormentaba sus almas a través del sueño, la mañana llega al fin, un muchacho con ojos azules se levanta, se mete a la ducha y acto seguido se dirige a la habitación del pelirrojo, vistiendo únicamente unos boxers negros.
Rukawa: ¿Torpe?...Torpe levántate...Si quieres ir a la escuela será mejor que te levantes.
Al no obtener respuesta entra y ve que Hana está profundamente dormido
Rukawa: Vamos levántate....¡Te digo que te levantes! // comienza a sacudirlo no muy amablemente// ¡¡Anda, diablos!! // Ya fastidiado de estar intentando despertarlo se sienta en la cama a un lado de él, y sigue moviéndolo// Anda, arriba!!.// le dice mientras se inclina un poco hacia él//
Justo es ese momento el pelirrojo en medio de su sueño se voltea y lo abraza, el zorro es tomado por sorpresa y no sabe cómo reaccionar ante este gesto involuntario de Sakuragi, pero aún así lo único en lo que puede pensar es en lo bien que se siente estar entre esos brazos, casi quisiera quedarse ahí. Por su parte la reacción de Hana tuvo que ver más con una costumbre infantil en la que Hana abrazaba a su madre cuando ella trataba de despertarlo, la última vez que lo hizo fue mucho antes de que se separaran sus padres y el se fuera a vivir a Kanawa con su papá mientras su madre se iba a Europa.
La sensación que le producía estar abrazando ese cuerpo, era tan cálida que de buena gana se hubiera quedado ahí, sin embargo algo en su mente le hace ver que eso no podía ser, su madre no podía estar ahí, entonces ¿de quién era esa calidez tan embriagadora? Lentamente abre los ojos sólo para encontrarse otros ojos profundamente azules que le miraban con asombro. Al verlo tardó en reaccionar y sin embargo algo en su interior vibró al hacer conciencia del íntimo contacto con el chico de piel blanca. Se fue acercado sin querer como embrujado por esos ojos azules, poco a poco hasta quedar lo suficientemente cerca como para sentir el aliento de Rukawa en su rostro.
Estando ya a escasos centímetros de su boca su mente aún no parece reaccionar...No cae en cuenta de que un poco más y estará dando su primer beso, nada parece detener ese momento.
La distancia se acaba y sus labios se unen en un beso tímido que provoca en ambos chicos una gama de sensaciones que nunca se imaginaron.
Me da gusto verte, amanece apenas es el momento en que la noche parece ceder ante la luz de la mañana y el sol trata de borrar tu imagen, pálido reflejo de la luna...
Veo que vienes hacia donde estoy...Aún no sé cómo sucedió, de qué forma llegué a amarte hasta que este sentimiento inundó por completo mi ser...Te acercas más.
Sigo observándote y recuerdo cómo empezó todo...Fue hace algún tiempo cuando al fin me decidí a decirle a Haruko lo que sentía por ella...