Capítulo 2
-Ahhh .... ahhh..... aagghh... ha.... na.... hana!.... AAHHH!!!! al sentir mi orgasmo llegar no puedo evitar arquear mi espalda.... pero todo el placer que he podido sentir se desvanece tan rápido que ni siquiera he podido disfrutarlo...
Todo es culpa del doaho, han pasado 3 días desde lo ocurrido en las duchas, pero aún puedo recordarlo muy bien...ya que desde ese día no he podido dejar de masturbarme gritando el maldito nombre del pelirrojo!!!! Me siento avergonzado, me siento humillado!, es demasiado para soportarlo... por tal razón es que ni siquiera he ido a clases...
¿Qué demonios me ha ocurrido?
Tratando de distraerme tomo mi balón de básquet y me dirijo a la cancha más cercana... ya es tarde, así que tendré la cancha para mi sólo... escucho sonidos, me asombro al acercarme y sentir rebotes en el lugar, me asomo para ver de quien se trata, sin esperar lo que vería...
-¿Doaho? al escucharme se quedó inmóvil sin darme la cara.
-Doaho, ¿qué haces aquí? ni una palabra salió de sus labios ¡Eh! Te estoy hablando!!! diciendo esto te arrojo el balón directamente a tu cabeza, para mi sorpresa, te das vuelta y esquivas el balón con tus manos.
-¡¿... Sa... Sakuragi?! ahora te puedo ver con claridad, has estado llorando, tus ojos están rojos y hinchados...¿Qué fue lo que te pasó?
-¿Te complace verme en este estado zorro? me dices de repente.
-Por supuesto que te complace, es obvio, ya que me odias Ah? Qué estás diciendo? No puedo dar crédito a lo que estoy escuchando.
-¿Pero sabes? A mí ya no me importa, no... ya no más, porque la razón de mi odio hacia ti ya no existe...
-¿Qué? me escucho decir, aún no comprendo, no entiendo nada.
-¿No te sientes feliz, zorrito? al tiempo que hablas me das una amarga sonrisa.
No puedo, no puedo hablar, me has dejado petrificado... ¿Quién te ha hecho tal daño? ¿Quién ha sido?
Sin alcanzar a preguntarte nada tomas tu balón y te alejas sin mirar atrás.
Una gota salada recorre mi mejilla, seguida por otra, y otra más, estoy... ¿llorando? ¿Cuando fue que aprendí a llorar? ¿Es que acaso tanto me afecta el verte destrozado? ¿Es que acaso no debería sentirme complacido? ¿Acaso no debería burlarme de ti?
Maldición, maldición!!!!!!!! Me duele, me duele!!
-Te odio, te odio!!! grito fuertemente.
-Te odio... - porque... porque te quiero, porque te amo, y me odio a mí mismo aún más porque acabo de comprender que te amo más de lo que te odio...
¿Qué se supone que haré ahora?
Hola otra vez, ya me estoy poniendo fuerte, ¿verdad? Jeje esperen a que avance un poco más. ^_^