Capítulo 5: La llamada


Tres días después, Sakura recibió la, tan esperada, llamada telefónica. Eran las cinco de la tarde y hacía mucho calor. La joven Kinomoto estaba en la sala, acostada en un sillón, hojeando un periódico, completamente aburrida; cuando Haruka llamó...

*Rinnng* *Riiiiiiingggg*

-¡Ya voy!-Exclamó Sakura, corriendo hacia el aparato en un tiempo record-¿Si? Habla Kinomoto...

-Hola Sakura.

Al escuchar aquella voz, la joven Kinomoto se ruborizó al instante.

-¿Ha...Haruka? Eres tú, ¿verdad?-Preguntó.

-Sí. Sólo llamaba para avisarte que iré a Tomoeda el domingo...

Sakura miró el calendario, apenas era miércoles.

-Está bien-Dijo.

-El domingo iré a tu casa para darte los boletos del recital, ¿cuántos quieres?

-Déjame pensar...-Murmuró Sakura, pensando en su hermano, en Tomoyo, y en Yukito...Su padre no podría asistir porque estaba de viaje-Cuatro boletos.

-Bien. Nos veremos el domingo-Dijo Haruka, en tono amistoso-Cuídate.

-Sí, sí...Gracias...-Murmuró la joven Kinomoto, nerviosa.

Sakura colgó y volvió a sentarse en el sillón, donde se quedó un buen rato, suspirando y mirando por la ventana. Le dolía pensar que Haruka estaba con Michiru. Una hora después, Touya y Yukito llegaron a la residencia Kinomoto.

-¡Hola!-Exclamó Tsukishiro alegremente, al ver a la pequeña en el sillón.

-Buenas tardes-Dijo la joven Kinomoto.

Su hermano gruñó algo y, estuvo a punto de caminar hacia la cocina, cuando su hermana dijo:

-Hermano...

-¿Qué pasa, monstruo?-Preguntó Touya, dándose la vuelta y mirando a la niña.

-El recital de Haruka será el domingo y le pedí boletos para todos...-Murmuró Sakura, ante la hostil mirada de su  hermano mayor.

Antes de que Touya pudiera gruñir alguna respuesta, Yukito dijo:

-¿El domingo? Escuché que Michiru Kaioh dará un concierto el mismo día.

-Yuki...-Dijo su amigo, un tanto confundido.

-Sí, Haruka es su amigo...Me comentó que le gustaba tocar el piano mientras ella tocaba el violín...-Respondió Sakura, esforzándose por ocultar su desencanto.

Tsukishiro y Touya intercambiaron una mirada llena de significado. Sin duda, lo mejor era asistir a ese recital y enfrentar de una vez por todas al tal Haruka.

***

Mientras tanto, en el departamento de Haruka y Michiru...

-¿Hace poco estuviste hablando por teléfono?-Preguntó la joven peliverde, entrando en la habitación donde estaba su pareja.

-Sí-Respondió Tenoh, con voz vacía.

-Oh...¿Y se puede saber con quién?

-Con Sakura Kinomoto.

-¿Quién?

-La niña que conocimos hace poco. La invité a nuestro recital...Parece que llevará a toda su familia.

-Ah-Murmuró Michiru, sin interés, mientras le daba la espalda a su pareja y comenzaba a hojear una revista.

-¿Qué te sucede?-Preguntó Haruka, confundida ante el extraño comportamiento de su ‘musa inspiradora’.

-Nada.

-Michiru...

-No te preocupes. No me pasa nada.

-Hmmm...

Ambas se quedaron en silencio por varios minutos, hasta que Michiru dijo:

-Iré a nadar un rato.

-Está bien-Dijo Haruka-Mientras tanto iré a dar una vuelta en motocicleta-Se acercó a su novia y le dio un beso de despedida-Regresaré en la noche.

-Cuídate-Murmuró la joven peliverde.

-Sí-Dijo Tenoh, antes de salir del departamento. 

Michiru caminó hasta la ventana, miró a través de ella con ojos tristes, y pensó:

-Haruka...¿Por qué no te das cuenta?