Yukito X TouyaYukito X Touya
Un día de campo especial
Por: Denisse
Un hermoso día se alzaba a los ojos de Touya mientras éste intentaba acostumbrarse a la luz que se asomaba desde la ventana clavando su fulgor directamente en los ojos del muchacho.
Él sabía que tenía un asunto pendiente para hoy, pero por más que lo intentaba, no lograba recordar qué. Touya decidió no intentarlo más, ya que si eso que tenía que hacer era realmente importante, lo recordaría tarde o temprano. Así que se levantó de un salto de la cama y se dejó caer en el suelo para comenzar a hacer sus ejercicios matutinos.
Cuando iba recién por la flexión 110 escuchó un tímido susurro que venía de la parte mas cercana a la puerta de su habitación.
-Hola To-ya.
*Cuanto tiempo llevaba observándolo* Diablos, ¿acaso eso importaba?
-Hola Yuki—Le ofreció una gran sonrisa que menguaba entre cansancio y sincera alegría de verlo.
Como respuesta a la pregunta silenciosa de Touya, Yukito dio una breve explicación:
-Llevo un rato observándote, pero me dio pena despertarte y cuando te vi hacerlo estabas tan absorto en tus pensamientos que no quise interrumpir. ^_^
-Yuki, no tienes que explicarme nada, ¿pero qué haces aquí tan temprano?
Yukito se sintió muy mal y su eterna sonrisa se borró por completo.
-¿Acaso no lo recuerdas?
Touya trató de recordar hasta que sus ojos se fijaron en la ropa abrigada de Yukito y la mochila de acampar que llevaba....o Dios, ¿cómo pudo olvidarlo?
-Oh, Yuki, lo lamento es sólo que me acosté tarde y....
-Tranquilo To-ya, ya lo recordaste, eso me hace feliz.....VAMOS!! Esperaré a que te vistas, los chicos se están preocupando por tu tardanza y no queremos hacerlos esperar. ^_~
Yukito salió del cuarto y aunque trataba de sonar alegre, Touya supo que lo había lastimado en lo más profundo al no recordar el paseo en el cual celebraban su segundo año de haberse conocido.
Touya escogió la ropa con cuidado ya que no quería pescar un resfriado, con lo débil que estaba no sería nada extraño, después de haber cedido sus poderes hace más de un mes a Yue, todavía se sentía débil y cansado, aun no podía creer que Yukito lo hubiese estado mirando por más de 30 minutos y él no se hubiera dado cuenta.
En otras circunstancias él se hubiera dado cuenta aunque lo mirase tan sólo de reojo y a 30 metros de distancia. *Tal vez estoy exagerando *- pensó Touya un poco deprimido todavía por no haber recordado una fecha tan importante como esa y se dispuso a bañarse para luego cambiarse de ropa y alcanzar a su amigo y a los pequeños demonios antes de que comiencen a preguntarse el por qué de su demora.
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Yukito bajó las escaleras un poco cabizbajo pero sonrió alegremente al darse cuenta de que Tomoyo, Lee y Sakura lo estaban observando.
-¿Mi hermano ya está listo, Yukito?-Preguntó Sakura.
-Sí, To-ya ya baja, es sólo que se quedó dormido.
-Si tenemos que esperar por ese cabeza dura, creo que no saldremos de aquí hasta después del almuerzo-Lee se veía realmente enojado.
-Deberías calmarte Shaoran, mi hermano tuvo mucho trabajo ayer, además de la práctica de fútbol y todavía no se repone totalmente de sus ataques de sueño.
Lee puso una sonrisa sarcástica.
-Si todavía no se repone de sus arranques de sueño, ¿crees que sea seguro que él conduzca?, sólo faltaría que se durmiera y terminemos todos con él dentro de un barranco.
-Shaorannnnn!!!!- ¬¬ Sakura ya estaba perdiendo su paciencia.
-¿Qué sucede que noto al joven Yukito tan silencioso?
Sakura se viró para ver a Tomoyo quien señaló a un triste Yukito.
Sakura y Lee dejaron de pelear para observar a Yukito.
Yukito se encontraba de pie mirando hacia las escaleras esperando a que Touya bajara, pareciera que no hubiese escuchado palabra de lo que ellos estaban discutiendo.
La voz de Tomoyo lo sacó de sus pensamientos:
-Joven Yukito, lo veo pensativo, ¿qué le sucede?
-Sucede que hoy es un día muy especial, ya que cumplo dos años de haber conocido a To-ya ^_^U Es un día muy feliz y quiero que comience ya!
-Esa es la razón por la que mi hermano propuso este viaje, ¿no es cierto Yukito?
-Sí, pequeña Sakura, él quería que todos estuviésemos juntos en este día.
-¿Y desde cuándo ese TODOS me incluye a mí?—preguntó Lee visiblemente asombrado de que Touya lo hubiese invitado.
-Aunque To-ya lo niegue, él te aprecia y sabe que eres muy importante para Sakura ^-^
Sakura y Shaoran se pusieron rojos como semáforos ante las palabras de Yukito.
De repente Sakura se animó visiblemente.
-Mi hermano merece pasarla bien en éste día, así que vamos a tratar de complacerlo lo mejor que podamos.......Verdad Shaoran ¬¬???
-¿Por qué me preguntas a mí?, él es siempre el que comienza a fastidiarme.
-Tienes razón Sakura, To-ya se ha extralimitado mucho esta semana, él todavía no se recupera del todo y sin embargo está entrenando todos los días, a parte del estudio y el trabajo nocturno que mantiene...Hay que hacer que se sienta bien hoy—Yukito habló realmente convencido.
Todos asintieron enérgicamente menos Lee que mencionó un sí de muy mala gana pero aceptando internamente que el muchacho se esforzaba demasiado.
-No sé por qué ese cabeza de chorlito hace tantas cosas al mismo tiempo si sabe que está débil todavía.
Se escuchó una voz desde las escaleras que respondió la pregunta de Lee de muy mala gana y en ese momento todos pensaron que la afirmación de Lee no podía haber sido mas inoportuna...........*A ese paso jamás se llevarán bien* , -_-‘’ Todos bajaron la cabeza esperando el comienzo de una guerra que podía durar todo el día.
-Ya que tanto te interesa, mocoso, sabrás que estudio, para no crecer como un ignorante, sigo las prácticas de fútbol porque me inscribí antes de comenzar a trabajar, todos cuentan conmigo y trabajo porque el dinero de papá no alcanza para todos los gastos, ¿algo más que desees saber mocoso?
Por primera vez Lee bajó la cabeza apenado ante Touya.
-No, nada....
-De acuerdo, ya estoy listo, suban todos al auto mientras voy a dejarle una nota a papá diciendo que no llegaremos a cenar.
Todos obedecieron menos Lee que se quedó observándolo.
-¿Qué sucede mocoso, acaso no escuchaste? ¬¬-Touya estaba perdiendo la poca paciencia que le quedaba.
-Es sólo que.....lo siento......
Lee salió corriendo tal y como lo hacía cuando algo realmente lo apenaba y Touya se permitió una sonrisa al pensar que el mocoso no era tan malo después de todo.
Luego de unos minutos Touya se embarcó en el auto para comenzar el viaje.
-¿Todos trajeron ropas abrigadas? Hará mucho frío.
Todos asintieron con un fuerte...SÍ!!!!!
*Se ven emocionados, pero tengo el presentimiento de que éste será un largo día* con éste pensamiento Touya encendió el carro y se dirigieron rumbo a las montañas.
En medio camino Touya casi pierde en control del carro al ver que algo salía de su mochila.
-Ya llegamos???????—Kero se había escondido en la mochila del muchacho dándole un susto de muerte.
-Cuidado!!!!!!-Yukito gritó y Touya recuperó el control del auto ya que había perdido sus poderes pero no sus reflejos.
Aún con la vista en el carretero y un semblante angustiado en su rostro Touya pegó un grito que hizo que todos se sintieran con miedo.
-¿QUÉ TE PASA PELUCHE, ACASO NO VEZ QUE YA NO TE PUEDO SENTIR?—bajando el tono de voz—Pudiste ocasionar un accidente, no lo vuelvas a hacer.
Los ojos de Touya no habían salido del carretero ni un segundo y se mostraban fríos y preocupados, Yukito pensó que debía ser por el susto que trataba de ocultar bajo sus modales fríos y seguros.
Yukito lo miraba fijamente y Touya se dio cuenta de esto así que le dirigió una sonrisa por el retrovisor y le pasó un papel por detrás del asiento.
Yukito se apresuró en abrirlo.
“Feliz día, Yuki”.
Con estas simples palabras Yukito se sonrojó -^_^-, ocasionando que todos se preguntaran que decía ese papel.
Después de 2 horas de viaje, entre risas y bromas Touya anunció que llegarían en 10 minutos y todos se alegraron.
-Qué bien-gritó Kero y comenzó a hacer el recuento de las provisiones-Hay suficientes sanduches, y pastel, y jugo, y té, y dulces, y.....
-Sí Kero, ¿acaso no puedes estar 2 minutos sin pensar en comida?-contestó Sakura.
Para nadie pasó inadvertido el sonrojo de Yukito y cuando éste notó que lo estaban mirando, dijo como pura explicación:
-Lo que sucede es que yo también deseaba hacer esa pregunta ^^?
Todos rieron y menos Yukito y Kero quienes pensaban en la comida.
De repente Kero se levantó y miró fijamente a Yukito.
-Veo que después de todo eres realmente muy diferente a Yue.
-¿Y eso es malo?-Yukito se veía preocupado.
-No, no lo es-Kero sonrió sabiendo que Yue probablemente estaba escuchando todo–Yue es un sujeto muy aburrido, y serio, no se ríe, no come.....
Kero siguió hablando hasta que se percató de que Yukito lo miraba impactado.
-Eso significa que Yue es una mala persona–Yukito estaba verdaderamente intrigado.
-NNNOOOOOOOOO!!!! o.O! Yue es genial, es sólo que quise molestarlo, es mi manera de demostrar que lo aprecio.
-Él siempre sabe lo que pasa cuando yo estoy aquí, sin embargo yo no sé nada de lo que pasa cuando él actúa–Yukito había sacado algo que tenía atorado en su alma con la esperanza de que el guardián solar le diera alguna respuesta.
A todos se les encogió el corazón pensando en lo difícil que debe ser esto para Yukito, pero el guardián solar no se dio cuenta de que Yukito esperaba una respuesta.
Yukito se dio por vencido y dejó de ver al guardián solar, entonces Touya habló:
-La vida de Yue no ha sido buena, si tú y él vuelven a ser uno sólo ya no te podrá proteger de sus recuerdos...De tus recuerdos, él quiere mantenerte libre de sufrimiento.
-¿Cómo sabes eso, To-ya?
-Él me lo dijo, cuando yo le pregunté lo mismo.
-To-ya por....
-Porque tú merecías saber, Yuki.
Kero quedó asombrado ante la franqueza del guardián lunar hacia este muchacho, ni a él le había comentado la razón por la cual había dejado al margen a su “identidad falsa” de sus recuerdos ya que tarde o temprano tendrían que fundirse en uno sólo.
Todos estaban concentrados en la conversación hasta que el auto se detuvo en un sitio verdaderamente hermoso y todos bajaron.
-LLEGAMOS-el grito de Sakura retumbó en el bosque.
-Es hermoso-Shaoran estaba asombrado.
-Es verdaderamente divino, joven Touya.
Touya miró a Tomoyo y sonrió agachándose para poder ponerse a su altura.
-Este es el sitio donde mi madre y tu madre me llevaron cuando yo tenía apenas 4 años, mamá se veía realmente feliz y siempre soñé con volver en alguna ocasión importante.
Touya se puso de pie y miró fijamente a Yukito, Yukito sonrió dándole las gracias a Touya internamente por haberlo considerado lo suficientemente importante como para traerlo a su sitio especial.
De repente todos se dieron cuenta de que el mantel y todos los alimentos ya habían sido colocados y un impaciente Kero los esperaba listo para comer.
-Kero!!!!! Qué apurado eres, la comida no se va ir caminando–Sakura estaba enojada, pero su estomago rugió y se dio cuenta de que ella también tenía mucha hambre.
Kero sonrió victorioso.
-¿Viste, viste? Tú también quieres comer. Jeje, vamos Sakurita admítelo, tienes hambre, tienes hambre.
Yukito se acercó al mantel muy calmadamente y dirigió una hermosa sonrisa al grupo.
-La verdad es que yo también tengo mucha hambre -^_^-
-Bueno, ¿pues qué esperan para comer?
Touya se acercó al mantel calmadamente y con los brazos detrás de su cabeza cuando un peso enorme se posó sobre su cuerpo, un peso que lo hubiese hecho caer de no ser por la rápida intervención de Yukito quién lo sujetó en sus brazos al pararse rápidamente frente a él.
-TOUYAaaaaa–Nakuru mostraba una gran sonrisa.
-Dios Akizuki, bájate, PESAS.
-Cualquiera diría que no estás feliz de verme, querido Touya.
-Pues no, no lo estoy.
Nakuru fijó sus ojos oscuros en Yukito quien aún sostenía a Touya y se apartó de él para que Yukito pudiera soltarlo ¬¬.-
-Hola Tsukishiro disculpa, no te vi.
-¿Qué hacen aquí?– Shaoran se puso en guardia al ver aparecer la figura de Eriol cargando en brazos a Espinel Sun.
Nakuru contestó a la pregunta con alegría:
-Tan sólo paseábamos por las tierras de Eriol.....¿Y ustedes qué hacen en un lugar privado?
-Déjalos Nakuru, yo se que este lugar es muy importante para alguien, y yo no soy nadie para arruinar un día tan especial-Eriol dirigió una mirada profunda a Touya que no pasó inadvertida para Yue que se agitaba preocupado dentro del cuerpo de Yukito.
Eriol se retiró tan rápido como vino dejando a todos sin habla.
-Chao, querido Touya.
Cuando Touya se viraba Nakuru le plantó un beso en los labios que lo dejó sin habla.
-Esto es para que me recuerdes.
-¿Quién quiere recordar un dolor de cabeza?– dijo Touya por lo bajo.
Dentro de Yukito algunas emociones estallaban pero la que más predominaba eran los celos, ¿cómo se había atrevido Akizuki a besar a Touya de esa manera...? Y contra su voluntad, Yue se sentía nervioso debido a este sentimiento que se exteriorizaba en Yukito. Pero su temor se alejó cuando Touya se limpió el beso y caminó directo a la manta donde lo esperaban todos sin siquiera mirar a la pretenciosa Mariposa de Rubí.
Yukito se dio cuenta de que aunque no tuviera posibilidad de que Touya se fijara en él al menos él tenía su protección y cariño de amigo, cosa que nadie más tenía, ya que cualquiera tenía que ser muy afortunado para que Touya le dirigiera más de doce palabras en un día.
Yukito no se dio cuenta cuando fue que todos comenzaron a comer, estaba absorto en sus pensamientos y sólo calló en cuenta de esto en el momento en el cual Touya posó una mano delicadamente sobre la suya y le tendió un ENORME trozo de pastel.
Yukito lo aceptó y se lo terminó en casi un bocado.
-Sí que es rápido para comer el joven Yukito–Tomoyo lo miraba con asombro mientras que un hambriento Yukito acababa con toda la comida a su paso seguido de cerca en velocidad por el pequeño peluche volador.
Sakura y Touya quienes ya estaban acostumbrados se sonrieron el uno al otro y comieron tranquilamente, mientras que Lee y Tomoyo no podían creer que alguien comiese tanto.
Luego de la comida Tomoyo se quedó profundamente dormida junto a Kero cerca de unas flores, mientras que Sakura y Lee fueron a dar un paseo al lago.
Touya ya se había dado a la idea de que el mocoso era el primer novio de su hermanita, pero ésta idea lo molestaba enormemente.
-¿Pero por qué, Yuki?
-To-ya...Sakura quiere estar cerca de Shaoran, y ya es hora de que te des cuenta de que se quieren y es normal que quieran pasar un rato a solas.
-No me gusta eso ¬¬
-Me lo imaginaba -_-;"
-Quiero ver sólo si el monstruo está bien.
-To-ya..... –Yukito lo miraba seriamente detrás de sus anteojos.
Touya sonrió dándose por vencido así que decidieron dar una caminata por su cuenta.
Después de 20 minutos de caminata llegaron a un hermoso lago, Yukito miró a Touya quién esbozó un sonrisa de culpabilidad y agarró a Yukito de la muñeca atrapándolo contra sí para esconderse detrás de un árbol para poder espiar a Sakura quien estaba de espaldas a ellos, Lee tomaba su mano y se veían realmente felices.
Yukito planeaba decirle que lo que hacía estaba mal y que esa falta de confianza hacia su hermana era incorrecta pero al sentirse tan cerca del joven moreno, de su amigo, al cual amaba y deseaba en secreto, todas las palabras se borraron de su mente y sólo pudo cerrar sus ojos para sentir el corazón de Touya latir agitado junto al suyo, la respiración de Yuki se aceleró dando cabida a nuevas emociones hasta que la voz de Touya lo hizo abrir sus ojos y fingir una sonrisa tan característica en él.
-Mira eso–Touya estaba histérico-Ese mocoso está tomando la mano de mi hermana.
-Ella no parece ponerle mucha resistencia ^_^–dijo Yuki divertido mirando el rostro completamente rojo de Touya.
-Ella es apenas una niña.
-Ya no lo es To-ya, déjala que viva su primer amor porque no te voy a dejar interrumpirlos.
Yukito puso ambas manos sobre los hombros de Touya y lo obligó a marcharse de ahí antes de que cometiera una locura.
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Después de 3 horas de agitada caminata Touya cayó rendido al suelo debido al cansancio y al intenso frío que había surgido de un momento a otro en aquel lugar tan alto. Yukito se preocupó muchísimo y olvidó por un momento el intenso frío que él mismo sentía al fijar sus ojos en las 2 gemas azules de Touya, las cuales iban perdiendo su brillo y se apagaban poco a poco debido a la debilidad y al viento helado que soplaba de manera antinatural.
*Clow, nunca le gustó ser rechazado o echado de ningún lado– Yue estaba intranquilo*
-To-ya, ¿estás bien?–Yukito se sentía indefenso, qué haría donde algo le pasara a Touya, estaban muy lejos y nadie lo escucharía gritar.
-Tan solo estoy cansado Yuki, voy a dormir un poco.
Yukito sabía que donde Touya se durmiera con el frío reinante podría morir en cuestión de segundos debido a un ataque cardiaco.
Touya estaba acostado en la nieve mientras temblaba y a Yukito se le salían las lágrimas por la desesperación.
-To-ya, no te duermas, por favor.
-Yuki...yo te qu..iero decir que yo...
-No hables, no te esfuerces y no cierres tus ojos.
Yukito abrazó a Touya protectoramente como tantas veces lo había hecho su amigo con él.
-To-ya....To-ya, responde, por favor–Yukito lloró desconsoladamente, dando rienda suelta a todo el terror que estaba viviendo sin creer que unas horas antes todo había sido alegría.
Las lágrimas calientes cayeron sobre el rostro de Touya, y Yukito esperó que fuera como en las películas, donde en el momento en que las lágrimas calientes de alguien caían sobre el rostro del ser amado éste abría sus ojos y todo estaba bien pero nada pasó, Touya estaba frío como el hielo.
Yukito sintiéndose desesperado se sentó sobre Touya y se apretó contra él tratando de darle calor, luego se retiró los lentes y colocó sus manos en los hombros de Touya y comenzó a agitarlo con desesperación.
-DESPIERTA, DESPIERTA, no me dejes solo—la voz de Yukito bajó hasta convertirse en un murmullo—No...me dejes To-ya, no lo hagas...no...no...
Yukito apartó los cabellos rebeldes de muchacho y tocó su frente para luego besarla y susurrar en su oído:
-No me puedes dejar porque yo te amo, ¿me escuchaste? Te amo.
Touya reaccionó ante estas palabras abriendo apenas sus ojos.
-Yuki...
-Sí, To-ya eso es, despierta, no me dejes, haz un esfuerzo, todo saldrá bien.
-Yuki...yo...tam...bién...te...amo y no voy a dejarte.
Touya se levantó sintiendo que el mundo daba vueltas y posó una mano en la mejilla de Yukito mientras éste lo abrazaba para que pudiese caminar.
Después de 10 minutos Yukito ya no pudo más y ambos cayeron en la nieve sin remedio.
-To-ya lo siento, tú estás débil por mi culpa, por salvar mi vida que no vale nada–Yukito estaba histérico consigo mismo y se sentía basura, sentía que Touya se le iba poco a poco y no podía hacer nada.
Touya se puso de rodillas y miró fijamente a Yukito, sus ojos brillaron al escuchar tales palabras y un golpe se dirigió directo a la mejilla del conejo de la nieve.
Yukito tomó su mejilla totalmente roja y miró a Touya con ojos tristes.
-Yuki, nunca digas eso....¿Me entiendes...? Jamás!!!!! Tú eres lo más valioso que tengo y si no fuera por ti me dejaría morir en éste mismo instante–Touya se echó a llorar por la presión de saber que estaba muriendo y por el dolor de haber golpeado a Yukito.
Yukito sonrió y lo abrazó.
-Gracias To-ya, estoy más tranquilo, ambos vamos a salir de aquí.
Touya aún con lágrimas en sus ojos tomó el rostro de Yukito y besó sus labios.
-Nunca digas que tu vida no vale nada, porque es el tesoro más valioso que tengo.
Yukito se abrazó a Touya y ambos quedaron estáticos, sabían que iban a morir pero ninguno se atrevía a decirlo.
Dento de Yukito, Yue se sentía infeliz y realmente desesperado, nunca se había sentido tan impotente, por más que trataba, no podía salir de su prisión, él amaba a Touya con su alma y no podía soportar verlo morir ahí junto a él.
Yukito alejó a Touya de él y pudo observar su rostro, sus ojos estaban cerrados y sus labios morados, él temblaba inconteniblemente y sólo mencionaba su nombre.
De repente Yukito/Yue se unieron en un pensamiento común de protección y ambos lloraron y besaron a Touya suplicando por un milagro, en ese momento cambiaron, sin que Yue haya sido invocado por el Ama, simplemente cambiaron, porque así lo desearon ambos.
Touya abrió ligeramente sus ojos y se encontró besando al ángel.
-Yuki, estoy muerto, ¿estás conmigo o estoy solo?
Touya ardía en fiebre y no parecía reconocer a Yue.
Yue lo apretó fuertemente contra él mientras besaba sus labios para transmitirle calor, al contrario de otras veces Yukito podía ver todo lo que pasaba y se sentía bien de poderle dar calor a Touya.
Touya levantó el rostro al sentirse volando y miró a Yue reconociéndolo por fin.
-Yue, ¿tú...cómo?
-Porque te amo y no podía permitir que murieras, eres mi todo, ¿sabes?
Era la primera vez que Touya veía sonreír a Yue y su sonrisa le pareció tan sincera y hermosa como la de Yukito.
-Sí, los sé, yo también los amo.
-Somos uno así que trátame de tú.
Touya sonrió antes de caer desmayado nuevamente. Pronto llegaron al carro en el cual ya estaban Sakura, Lee, Tomoyo y Kerberos con la calefacción al tope y con el Guardián Solar dándoles todo el calor del que era capaz sin quemarlos.
Sakura pegó un grito de alivio al verlos pero lloró desconsoladamente por la angustia al darse cuenta de que su hermano estaba enfermo y tan azul.
Yue acomodó cuidadosamente a Touya en las piernas de Sakura y Lee en la parte de atrás mientras que Tomoyo se acomodaba adelante con Kero quien volvió a su forma falsa para poder entrar al automóvil.
Lee se desesperó.
-Qué vamos a hacer!!!!? Touya es el único de nosotros que sabe cómo manejar y no nos podemos quedar aquí hasta que nos encuentren porque él necesita un hospital urgente, demonios, ¿qué vamos a hacer?
Lee sentía todo su cuerpo tensado por la angustia mientras que Sakura no hacia más que abrazar a su hermano sollozando tristemente.
Yue quien no solía demostrar sus sentimientos se desesperó también.
-Yo lo haré, he visto a To-ya haciéndolo.
Todos se asombraron de la palabra “To-Ya” que era un apodo cariñoso impuesto por Yukito y ambos se dieron cuenta de que Yue no había sido invocado, y sin ser llamado o presentir algún peligro para el ama, él no puede salir de su prisión de carne...pero ya habría tiempo para preguntas, ahora lo importante era llevar a Touya a un hospital.
Emprendieron el camino y Yue manejaba con cierta dificultad, pero para ser su primera vez lo hacía muy bien.
Sakura y Lee trataban de darle calor a Touya ya que el guardián Solar en su forma falsa no podía.
Lee miró a Touya, se lo veía tan apacible, y por primera vez se dio cuenta de que el sentimiento que más predominaba siempre que lo veía, era la admiración, él realmente admiraba a ese chico frío y responsable, sincero y preocupado por todos y esperó con todas sus fuerzas llegar a ser así algún día.
Touya abrió sus ojos y Sakura gritó:
-Hermano, ya vamos a llegar, resiste, por mí...resiste.
Touya miró a Sakura y su mirada se perdió en sus enormes ojos verdes.
-Monstruo....yo voy a estar bien...no llores—dijo limpiándole las lágrimas que se escurrían por su rostro.
Lee agarró fuertemente su mano para sorpresa de Touya y le dijo con una enorme sonrisa:
-Claro que vas a estar bien, hierba mala nunca muere, ¿no?
-Tú...estás vivo mocoso...tal vez...tengas razón...
Touya volvió a desmayarse justo cuando Lee le susurraba:
-Te admiro mucho, no nos dejes, se fuerte.
Yue no observaba nada pero escuchó la conversación con sus ojos llenos de lágrimas, su mirada violeta se llenó de lágrimas frías y amargas.
Kero y Tomoyo no podían hacer nada más que mirar con impotencia todo lo que ocurría.
Tomoyo tomó dulcemente la mano de Yue.
-Vas a ver que va a estar bien, la gente buena no muere.
-Mi antiguo amo murió.
Kero reaccionó ayudando a Tomoyo en la difícil tarea de animar al ángel.
-Él no murió, él ya no quiso vivir mientras que el hermano de Sakura quiere hacerlo.
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Luego del largo viaje llegaron a una clínica.
Tomoyo salió corriendo para pedir una camilla o un médico a gritos, Yue volvió a ser Yukito y se dispuso a cargar con ayuda de Lee y Sakura el pesado cuerpo de Touya que ahora no podía ofrecer ni la más mínima ayuda debido a su inconciencia.
Los paramédicos llegaron y subieron el cuerpo de Touya y se lo llevaron mientras que una enfermera llevaba a un desesperado Yukito a la sala de espera.
En la sala de espera todo era tensión, Sakura había ido a llamar a su papá mientras que Tomoyo reglamentaba los documentos ya que Yukito no podía hacerlo en el estado en que estaba.
Lee posó una mano amistosa en su hombro.
-Realmente lo amas, ¿no?
-Con toda mi alma–respondió Yukito, esta vez sin sonreír.
-Él va a estar bien, es fuerte.
En ese momento entraron Sakura y Tomoyo, con Kero en brazos fingiendo ser un peluche.
-Papá viene en camino–Sakura estaba llorando todavía pero se había calmado.
-Yo ya puse todos los datos en regla y me han informado que está en terapia intensiva debido a la hipotermia pero que ya ha despertado–dijo Tomoyo alegre.
Yukito sonrió y abrazó a Tomoyo, luego a Lee y por último a Sakura quien estaba igual de feliz y lo abrazó con fuerza.
-¿Ya podemos verlo?–preguntó Yukito a Tomoyo, todavía con Sakura en brazos dando vueltas de alegría por toda la sala.
-Sí–Tomoyo asintió con alegría.
Yukito miró a Sakura quien le dijo que vaya él primero, entonces Yukito salió corriendo tropezando con todo lo que se interponía en su camino hasta llegar a donde un doctor que le dijo que su amigo estaba internado en la habitación 492.
Yukito caminó lentamente hacía el cuarto de Touya y casi muere de la impresión al verlo despierto pero conectado a incontables cables y recibiendo aire de una máquina.
Touya sonrió al verlo a través de la máquina de aire. La enfermera miró a Touya y luego a Yukito.
-No deje que se altere, no puede hablar. Sabe...este hermoso joven tiene unas increíbles ganas de vivir, todavía no puedo creer que se haya salvado, llegó aquí más congelado que vivo aunque eso ya debe de saberlo usted...Adiós.
Yukito tomó la mano de Touya y pensó en lo hermoso y calmado que lucía...tan débil, tan frágil, tan diferente a lo que él era.
El continuo sonar de la máquina de respiración era insoportable y tétrico pero se obligó a no llorar, quién era él para llorar??Ssi Toya no lo hacía él tampoco.
Touya como oyendo los pensamientos de Yukito cerró sus ojos y cuando los abrió Yukito notó que estaban llenos de lágrimas, embargados en un llanto silencioso.
Yukito trató de calmar sus emociones y lo miró profundamente mientras besaba su mejilla.
-To-ya, ¿por qué lloras...? No me hagas esto, ¿dime? Te duele algo.
Touya no podía responder pero señaló su pecho y cerró los ojos.
Yukito le dijo calladamente y con lágrimas en los ojos:
-Yo también te amo, To-ya.
Touya sonrió y dejó de llorar sumiéndose en un profundo letargo debido a los calmantes.
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Cuando Yukito salió de la habitación se encontró con los tristes y preocupados ojos del Señor Fujitaka a quien Yukito abrazó llorando de alivio mientras éste le preguntada calmadamente:
-¿Cómo está, Touya?
-Ya está libre de peligro–respondió Yukito sonriendo y apartándose del Profesor.
-¿Puedo verlo?
-Ahora está dormido, pero puede entrar a verlo.
El Profesor entró seguido por Sakura y no salieron en largo rato por lo que Tomoyo, Lee y Yukito asumieron que se quedarían velando el sueño de Touya hasta que éste despertara.
Tomoyo se marchó a su casa junto con Kero mientras que Yukito y Lee decidieron pasar toda la noche en la sala de espera.
Yukito miró a Lee.
-Bueno, parece que tú y To-ya después de todo serán grandes amigos.
-Si él lo desea–Lee se sintió triste al decir éstas palabras pero sabía que eran ciertas, Touya lo detestaba.
-To-ya te quiere mucho y aunque nunca te lo diga también te admira–dijo Yukito recordando las palabras de Lee en el carro.
-¿A MÍ? ¿Por qué alguien como él iba a admirar a alguien como yo?
-Porque eres leal y eres el que ha protegido a Sakura cuando él no ha podido y tú ya deberías saber que su hermana es su más grande tesoro.
-Lo sé, ella y.....tú.
Yukito sonrió y Lee se alegró al saber que había dicho algo que había sacado esa enorme sonrisa del rostro de Yukito.
------1 SEMANA DESPUÉS-------
-Demonios Yuki, me duele, no quiero caminar todavía.
-Debes hacerlo, el frío agarrotó tus músculo y es la primera vez que das más de 20 pasos desde el accidente ^_^ -Yukito trataba de razonar con un testarudo Touya mientras que Sakura lo empujaba para que caminase.
*Cuando To-ya quiere portarse como niño caprichoso de verdad que puede hacerlo* Yukito se rindió y Touya se sentó enojado.
-Hermanooooo, por favor–Ni la mejor de las sonrisas y pucheros de Sakura lograron hacerlo caminar.
-Eso no le va a hacer bien, joven Touya-Tomoyo sabía que no lograría nada, pero nada le costaba intentarlo.
De repente se escuchó una voz a lo largo del pasillo:
-Apuesto que no podrías caminar aunque quisieses.
Todos se voltearon para ver la sarcástica mueca de Lee.
-Comenzamos–Sakura y Yukito se miraban resignados -_-;
-Mocoso, ya verás cuando pueda levantarme ¬¬
-¿Acaso no puedes hacerlo ahora?
Esa fue la gota que derramó el vaso, ante el asombro de todos Touya se levantó dificultosamente y sin ninguna ayuda caminó directo a donde se encontraba Shaoran a paso lento y firme y al llegar lo miró con una sonrisa de victoria en sus labios.
-¿Qué dices a eso, mocoso?
-Pues que sabía que lo lograrías–Lee se sonrojó y Touya revolvió sus cabellos con ternura para susurrarle en el oído:
-Parece que no eres tan malo después de todo pero si te pasas de la raya con mi hermana te daré una paliza de la que no te olvidarás.
Shaoran le sonrió más rojo que un semáforo en stop.
-Entendido.
De repente Touya se tambaleó y Yukito corrió a ayudarlo ya que el peso era demasiado para Shaoran.
Yukito llevó a Touya en la silla de ruedas a dar una vuelta y se detuvieron en el parque del hospital, Touya se volteó y miró a Yukito quien respondió:
-Me detuve solo para verte....No sé de qué te asombras, eres hermoso.
Touya se sonrojó como nunca antes lo había hecho.
-Tú también eres hermoso Yuki y me encanta tenerte aquí conmigo.
Yukito se agachó para depositar un suave beso en los labios de Touya al tiempo en que le decía:
-Tuve tanto miedo de perderte.
-Te amo Yuki y no estaba en mis planes abandonarte.
-Yo también te amo, To-ya...Y te prometo que cuando te recuperes te invitaré una cena con TOOOODOOO lo que puedas comer -^_^-
Touya se sintió feliz de poder estar de nuevo junto a Yuki así que no protestó aunque él hubiese preferido quedarse viendo películas en casa con su amor recostado a su lado.
FIN
Nota de la autora: Me encanta esta pareja ˆ_ˆ Comentarios, pedidos, críticas a [email protected]