"Romances de un amor prohibido"
Por: Alejandra Salmón/Sailor Rukawa



Capítulo 6: Mancha

Mancha, pequeña mancha repentina...


La noche por fin había pasado, ahora Hanamichi Sakuragi se encontraba corriendo hacia el gimnasio. Quería ver a Rukawa lo antes posible. Pero de pronto, se topó con Haruko.

   --¡Hola Sakuragi!—Exclamó Haruko alegremente—¿Cómo estás?
   --¿Ah? Hola Haruko.—Respondió Sakuragi sin mucha emoción.
   --¿Vas al gimnasio?—Preguntó Haruko.
   --¡Sí! ¡Hasta luego Haruko!—Dijo Hanamichi corriendo a toda velocidad hacia el gimnasio.
   --¿Sakuragi?—Pensó Haruko algo impresionada, Sakuragi nunca se comportaba de esa manera.

*      *      *

   El ejército de Sakuragi había observado cuidadosamente la pequeña conversación que Sakuragi había tenido con Haruko. Estaban muy confundidos, sobre todo Yohei.

   --¿Vieron eso?—Preguntó Takamiya.
   --Sí, es increíble.—Respondió el resto del ejército al mismo tiempo.
   --¡Oigan! ¿Qué les parece si vamos a comer algo?—Preguntó Takamiya.
   --¡Sí! ¡Vámonos!—Respondió el resto, excepto Yohei Mito.
   --¿Qué le estará pasando a Hanamichi? Nunca pensé que trataría de esa manera tan fría a Haruko, está raro desde ayer... ¿Qué le habrá pasado?—Pensó Yohei mientras salía de la preparatoria con el ejército de Sakuragi.

*      *      *

   Al fin Hanamichi había llegado al gimnasio, primero entró a los vestidores para cambiarse. El lugar estaba solo. Hanamichi se paró frente a su locker y comenzó a quitarse el uniforme, de pronto alguien tocó su hombro.

   --¿Ah?—Dijo Hanamichi mientras miraba hacia atrás.

   Hanamichi Sakuragi se quedó paralizado. Era Rukawa. Y ambos estaban solos en aquella habitación. Sakuragi no dijo absolutamente nada, sólo miró fijamente a Rukawa.

   --¿Qué... qué quieres?—Preguntó Hanamichi algo nervioso mientras le daba la espalda a Rukawa y se cambiaba de ropa.
   --Toma.—Murmuró Rukawa en voz baja mientras le entregaba sus cosas a Sakuragi.

   Hanamichi observó sus cosas, y se quedó callado. Después miró a Rukawa a punto de salir de la habitación y dijo:

   --Gracias, zorro.

   Rukawa abrió la puerta y se detuvo por algunos segundos, después, sin mirar a Hanamichi dijo:

   --Torpe. No dejes tus cosas en mi casa.

   Después Rukawa salió.

   --Rukawa... —pensó Hanamichi algo confundido.


Capítulos:
[1] [2] [3] [4] [5] [6] [7] [8] [9] [10]
[11] [12]

Regresa al menú principal